El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado hoy que la nueva Ley de Vivienda de Castilla-La Mancha será presentada el próximo otoño y que se estudia incluir la posible aplicación de un «impuesto o tasa especial» para quien acumula viviendas para especular.

Page ha aportado esta información durante el acto de entrega de las llaves de 19 viviendas de protección oficial en régimen de alquiler celebrado hoy Tarancón (Cuenca), y en el que también han participado el alcalde de la localidad, José López Carrizo; y la consejera de Fomento, Agustina García Élez, tal y como ha informado la Administración regional en un comunicado

Esta nueva norma, según Page, garantizará «en términos razonables» el acceso a una vivienda digna a las personas que más lo necesiten y facilitará «al máximo posible» las cooperativas de viviendas «bien entendidas» al amparo de los ayuntamientos «para que, cuando se construyan, atiendan a una demanda de verdad».

Además, ha avanzado que el Gobierno regional estudiará la posible aplicación de «un impuesto o tasa especial» para aquellos que acumulan viviendas con la finalidad de especular, «evitando que quienes las necesitan puedan acceder a ellas», además de suponer un sobrecoste añadido para la sociedad.

[ze_summary text=»La nueva Ley de Vivienda de Castilla-La Mancha será presentada el próximo otoño»]La nueva Ley de Vivienda de Castilla-La Mancha será presentada el próximo otoño[/ze_summary]El jefe del Ejecutivo autonómico ha abogado por «establecer controles» a nivel estatal y «estar vacunados para burbujas como la inmobiliaria y, consecuentemente, aportar seguridad a las generaciones venideras a la hora de acceder a una vivienda digna».

Un derecho que, tal y como ha destacado Page, está recogido como tal en la Constitución de 1978 y que, sin embargo, en los años de «vacas gordas» ha sido objeto de «especulación y mucho fraude».

Por ello, el presidente regional ha apostado por que aquellas viviendas que no terminan de salir al mercado, sean destinadas «a las personas que más lo necesitan» y ha lamentado cómo, en los peores años de la crisis, se ha permitido que «haya un millón de viviendas vacías» mientras se producían desahucios a diario.

También ha rechazado que las entidades «que han abusado» con el mercado inmobiliario se hayan «ido de rositas», con la creación de la Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), o «banco malo», para darles salida.

La Junta ha rehabilitado 387 viviendas protegidas en la legislatura

Por otro lado, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha rehabilitado en lo que va transcurrido de legislatura 387 viviendas protegidas en la región, lo que ha requerido una inversión de 551.898 euros.

Así lo ha indicado hoy en Tarancón (Cuenca), la consejera de Fomento, Agustina García Élez, que ha apuntado que en Castilla-La Mancha se han adjudicado durante el mandato 548 viviendas protegidas en régimen de alquiler, según ha informado en una nota de prensa la Junta de comunidades.

De ellas, 296 pertenecen al parque público de viviendas de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y las otras 252 de la empresa pública Gestión de Infraestructuras de Castilla-La Mancha (Gicaman).

El 8,69 por 100 de las 252 viviendas de Gicaman ha sido adjudicadas a personas víctimas de desahucio hipotecario, el 11,46 por 100 a víctimas de violencia de género y el 18,97 por 100 para familias con algún miembro de la unidad con discapacidad, que en el 20 por 100 de los casos necesitaban una vivienda adaptada.

Otro 21,74 por 100 han sido entregadas a personas que viven solas y un 14,23 por 100 a personas que viven en pareja pero no tienen hijos.

Además, se han entregado 65 viviendas a unidades familiares monoparentales (en torno al 25 por 100 del total), y otras 35 viviendas destinadas a familias numerosas (un 12,25 por 100 del total).

García Élez ha dado a conocer estas cifras con motivo del acto de entrega de llaves de 19 viviendas protegidas en régimen de alquiler en Tarancón, que son propiedad de Gicaman.