Una mujer caminaba hacia la estación de autobuses de Socuéllamos (Ciudad Real) cuando un hombre se le acercó por detrás, le tiró del bolso sin conseguir arrebatárselo y la golpeó con el puño y la cabeza, con tal fuerza que la víctima tuvo que ser atendida en el Hospital General de Tomelloso.

La mujer se defendió con tanta maña que mantuvo el bolso en su poder y le quitó las gafas al agresor, hecho que acabó siendo determinante para su detención.

Una vecina asomada al balcón hizo que huyera

Una vecina asomada a un balcón, alertada por los gritos, provocó que el presunto delincuente huyera sin haber logrado su objetivo.

En el hospital la víctima fue diagnosticada de varias heridas de gravedad. Tras recibir el alta fue al cuartel para poner la denuncia. Describió tan bien a su agresor que el retrato coincidía con los de un hombre que trabajaba en un establecimiento del municipio, persona que en seguida pasó a ser sospechosa porque tenía un amplio historial delictivo.

[ze_summary text=»El hombre admitió que las gafas eran suyas, hecho que agilizó la detención»]El hombre admitió que las gafas eran suyas, hecho que agilizó la detención[/ze_summary] 

Por si las sospechas fueran pocas, el hombre admitió que las gafas que le mostró la Guardia Civil tras personarse en su casa (entregadas por la víctima en el cuartel al hacer la denuncia) eran las suyas. Por último, la mujer reconoció a agresor en un exhaustivo reconocimiento fotográfico.

Por todo lo anterior, A.M.L.M., de 30 años, y vecino de Socuéllamos, fue detenido como presunto autor de un delito de robo con violencia en grado de tentativa.