La Audiencia Provincial de Asturias ha archivado de forma definitiva una denuncia presentada por antiguos exmiembros de la Asociación Lumen Dei contra el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, y el obispo de Cuenca, José María Yanguas. De esta forma, se ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por los denunciantes contra el archivo provisional acordado el pasado mes de marzo por el Juzgado de Instrucción número 2 de Oviedo.
Contra el nuevo auto de la Audiencia no cabe recurso, lo que supone el archivo definitivo de la denuncia. La magistrada había ordenado el sobreseimiento provisional al considerar que no han quedado acreditados los hechos denunciados. Por otro lado, los denunciantes afirmaban que Lumen Dei se divide en tres organizaciones independientes aunque las tres utilicen las palabras «Lumen Dei». Esta asociación fue creada en 1975 e inscrita en el registro de entidades religiosas; la «Unión Sacerdotal Lumen Dei», asociación pública de fieles erigida en Cuenca en 1986, y la «Unión Lumen Dei» constituida en Cuenca en 1986, que es la que depende del Vaticano.
El auto de sobreseimiento apuntaba que Sanz Montes, nombrado Comisario Pontificio de la Unión Lumen Dei en 2009, solicitó al obispo de Cuenca un certificado en el que se hiciera constar que las tres asociaciones «eran lo mismo». La jueza consideró que no consta que hubiera un acuerdo entre Sanz Montes y José María Yanguas para que éste emitiera un certificado «que no se ajustara a la verdad», cuando el obispo de Cuenca certificó que las asociaciones Lumen Dei, Unión Lumen Dei y Unión Sacerdotal Lumen Dei «son lo mismo y que son conocidas por Lumen Dei». Además, considera que Sanz Montes «se limitó a actuar de acuerdo con los poderes que le habían concedido» en una escritura autorizada por notario que se basaba tanto en el nombramiento como Comisario Pontificio de Lumen Dei como en la «aclaración» solicitada al obispo de Cuenca.
La magistrada llamaba la atención sobre el hecho de que Sanz Montes utilizó los documentos «que ahora se impugnan» para apoderar a varias personas en julio de 2009, «y ningún reparo pusieron los apoderados ni adujeron que el denunciado no pudiera actuar en nombre de la Asociación Lumen Dei o que los documentos que se presentaron a tal fin fueran falsos».