El Banco de Alimentos de Ciudad Real y la periodista Silvia Fernández-Pacheco, a título póstumo, han sido reconocidos hoy por el Ayuntamiento de Ciudad Real con el título de «Ciudadano Ejemplar 2012».
También ha estado nominada para recibir este reconocimiento la Conferencia de Nuestra Señora del Carmen de San Vicente de Paúl.
La alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero, ha entregado una estatuilla de Don Quijote al presidente del Banco de Alimentos, Segundo Alcázar, y a Noemí Fernández-Pacheco, hermana de la periodista Silvia Fernández-Pacheco, fallecida en noviembre de 2011, por su labor desinteresada y su implicación con la comunidad.
Romero ha recordado que, desde 1980, el Ayuntamiento de Ciudad Real inaugura cada 14 de agosto la feria y fiestas en honor a la Virgen del Prado con un acto «ejemplariedad» de aquellas personas que renuncian «a la comodidad» para construir «una ciudad mejor».
Ha destacado la labor de Segundo Alcázar que desde 2006 se encarga de recoger los excedentes alimentarios de instituciones, supermercados y donaciones de ciudadanos para distribuirlos por los hogares con necesidades básicas.
La institución ha pasado de recoger 300.000 kilos anuales a más del doble en el último año, gracias a que Segundo Alcázar ha «sabido remover las conciencias de los ciudadanos» y «extender el tsunami de la solidaridad por toda Ciudad Real».
En cuanto a Silvia Fernández-Pacheco, Rosa Romero ha destacado el «abrumador» número de avales que ha recibido la candidatura presentada por Onda Cero y por la Asociación de Periodistas de Ciudad Real, de instituciones, partidos políticos, colectivos y medios de comunicación.
Según la alcaldesa, el gran numero de avales pone de manifiesto que la periodista era «un referente para sus compañeros y para la sociedad ciudadrealeña».
Ha hecho hincapié en la «vitalidad» y en el «compromiso con la honestidad y el rigor periodístico» de Silvia Fernández-Pacheco, que falleció en un accidente de tráfico el 20 de noviembre de 2011.
«No era famosa, pero era importante», ha comentado Romero, quien ha valorado «la generosidad» de una persona que «era amiga de sus amigos, por encima de cargos, instituciones» y a la que la unía una estrecha relación tanto personal como profesional.