«Vamos a gobernar con el PSOE pero no para el PSOE». Así se ha pronunciado en rueda de prensa la secretaria de Organización de Podemos Castilla-La Mancha, María Díaz, poco después de conocerse el resultado de la consulta de la formación morada sobre la aprobación de los presupuestos regionales y su entrada en el Ejecutivo de Emiliano García-Page, unos resultados que han arrojado una importante victoria del «sí», con el 77,98 por 100 de los votos.
No sin antes destacar al alta participación que se ha registrado entre las bases, «superándose todos los niveles de participación de las consultas realizadas anteriormente», ha indicado que «lo que nos piden es un Podemos de gobierno que marque un perfil propio y que tenga un control de sus propias políticas».
Considera que comienza un «nuevo tiempo político en Castilla-La Mancha» y que «vamos a demostrar que se puede gobernar de otra manera». En este mismo sentido se ha pronunciado José García Molina, secretario general de la organización, quien se ha referido a una «fórmula nueva de entrada en un gobierno».
Ha reiterado que esta entrada se producirá con la adopción, por parte de Podemos, de una vicepresidencia de Gobierno que «trabaje, sobre todo, en transparencia institucional y participación ciudadana» y con la creación de una consejería para hacer realidad el plan de garantías de Podemos y sus tres ejes: «nadie sin casa, nadie sin suministro y nadie sin renta».
Aunque ya ha transcendido que José García Molina ocuparía la Vicepresidencia y María Díaz esa nueva consejería, el secretario general no ha querido hablar de nombres ya que «es algo secundario». Las personas que ocupen estos cargos de responsabilidad «serán solo los conductores de un equipo que queremos que sea competente en lo técnico, en lo político y en lo comunicativo». Añadía que a partir de ahora «estudiaremos quién entra».
[ze_summary text=»García Molina ha dicho que cuando la gente habla no hay pregunta que se le resista»]García Molina ha dicho que cuando la gente habla no hay pregunta que se le resista[/ze_summary]Preguntado por si esperaba este resultado tan abultado del «sí», ha comentado que «siempre confío en la gente» y que «cuando la gente habla no hay pregunta que se le resista». Sobre las voces discordantes que han surgido contrarias a la pregunta de la consulta y a la entrada en el Ejecutivo socialista, también ha apuntado que «cuando hay un proceso de primarias, una vez que las posiciones están resueltas -y de forma tan mayoritaria- la decisión se tiene que acatar», ya que «la asamblea es soberana y ha hablado alto y claro».
García Molina -quien ha recibido mensajes de felicitación del secretario general de Podemos y de otros compañeros a nivel nacional- ha dicho que en el partido se ha abierto un debate nuevo sobre el que hay que reflexionar: «si queremos ser oposición permanente o un gobierno diferente», un debate «que se está dando en Podemos y que es lícito» y en el que él se posiciona a favor de las oportunidades y no de los riesgos que supone la segunda opción.
Por otro lado, no ha querido valorar si su entrada en el Gobierno como vicepresidente supondría abandonar su escaño: «partido a partido, que dice el Cholo», ha indicado.
Por último, ha expresado que «quizá hoy hable con el Gobierno para establecer plazos» y que, «igual que dije que dimitiría si la consulta salía negativa», si el año que viene no se aprueba la renta garantizada, Podemos rompería el acuerdo de gobierno. «Nunca me ha desdicho de ese compromiso, ha concluido.»