En la operación conjunta que han desarrollado la Guardia Civil, la Policía Nacional y la Agencia Tributaria, 31 personas han sido detenidas tras caer una red dedicada al cultivo ilegal indoor de marihuana que exportaban al Reino Unido. Dos personas han sido detenidas en Guadalajara.
Se realizaron 21 registros en los que se llegaron a incautar 28.745 plantas de marihuana en las 15 plantaciones de las que disponía la banda, pesaban en total 5.000 kilos. Además, 220 kilos también fueron requisados. Estaban listos para su envío, distribución y consumo. Por último, la Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado encontraron una pistola del calibre 9 milímetro Parabellum con munición, una maquina para contar los billetes, 45.000 euros en efectivo, además de una gran cantidad de dinero en moneda china.
La mayoría de los detenidos, de origen chino
Aparte de los dos detenidos en Guadalajara, otras cinco personas han sido detenidas en León, cinco en Madrid, cuatro en Zamora, dos en Vizcaya, cinco en Valladolid, seis en Burgos y a uno de los cabecillas de la trama en Sevilla.
La mayoría de los detenidos son de origen chino y se les imputa los delitos de pertenencia a organización criminal, contra la salud pública, defraudación de fluido eléctrico y tenencia ilícita de armas.
Gran movilidad de la banda y organigrama bien definido
La banda contaba con gran movilidad. Empleaban documentación robada para adquirir vehículos, hacer contratos de alquiler o de luz.
La jerarquía y los roles dentro de la banda estaban muy bien definidos. Había diferentes escalones que iban desde los conseguidores, quien buscaba los inmuebles para poner las plantaciones, pasando por los montadores y cuidadores de las plantas, hasta los cuidadores, quienes se hacían cargo de que las plantas se desarrollasen.
Entonces entraban en juego los distribuidores, quien una vez que se recolectaba el material destinado al consumo y disponían de una red de colaboradores que se encargaban de distribuir la marihuana en paquetes que oscilaban entre los 5 y los 15 kilos de marihuana. Para hacerlo empleaban empresas de paquetería y siendo el destino final el Reino Unido.
Seguros contra las intervenciones policiales
En esta operación se empleaba un novedoso método para asegurar los envíos al Reino Unido, una «correduría de seguros». Ciudadanos chinos daba cobertura a las pérdidas ocasionadas por las intervenciones policiales de los envíos a cambio de una remuneración pactada previamente.
Las investigaciones se han desarrollado de forma conjunta por funcionarios de las Áreas Regionales de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria del País Vasco, Castilla y León y Madrid; agentes de la Guardia Civil de las Comandancias de Álava y de Guadalajara; así como miembros de la Policía Nacional pertenecientes a la Comisaría General de Policía Judicial, Ucdev, Comisaría General de Policía Científica, División de Coordinación Económica y Técnica, Jefatura Superior de Madrid y Comisaría Provincial de León, requiriendo el amplio dispositivo final el despliegue de más de 150 agentes y funcionarios de las unidades participantes.
Con esta operación, tutelada por los Juzgados de Instrucción números 1 y 4 de León y Alcalá de Henares respectivamente, se da por desarticulada esta organización criminal.