El director de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, Antonio Luego, se ha reunido con la directora general del Agua del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama), Liana Ardiles, en el marco de las negociaciones para lograr un nuevo pacto nacional del agua.
Tras el encuentro, Luengo ha explicado a encastillalamancha.es cuál es la postura que tomará el Gobierno regional de cara a este pacto sobre un recurso «que es cada día es más escaso y tiene una influencia climática cada vez mayor, en el sentido de que existe un déficit importante».
Uno de los temas más importantes y uno de los ejes fundamentales sobre el que se debe asentar el futuro acuerdo por el agua es el de satisfacer las demandas. Este es el episodio de mayor discrepancia histórica, sobre todo a lo que a Castilla-La Mancha se refiere, ya que es la cuenca del Tajo la que, además de las suyas, también satisface parte de las del Júcar y sobre todo del Segura.
En este sentido, el Gobierno del Estado quiere establecer cuáles son los trasvases que existen en el país, «incluso se quiere hacer un catálogo de trasvases«, donde vengan todos recogidos, explica Luengo.
[ze_summary text=»Al final todas las cuencas dicen ser deficitarias y a dónde íbamos a remitir para satisfacer las demandas»]Al final todas las cuencas dicen ser deficitarias y a dónde íbamos a remitir para satisfacer las demandas[/ze_summary]Con respecto a las demandas, el Gobierno regional cree que «cada cuenca se tiene que ajustar a sus demandas y a los recursos que tiene». Porque hasta ahora, las cuencas deficitarias recurrían al Plan Hidrológico Nacional para reclamar el agua que necesitan, pero que no tiene.
«Nosotros hemos dicho que lo que no se puede hacer es recurrir al Plan Hidrológico Nacional, porque entonces nos llevaría al absurdo, al final todas las cuencas dicen ser deficitarias y a dónde íbamos a remitir para satisfacer las demandas», ha afirmado Luengo.
Cabe recordar que los para paliar los déficits de las cuencas la Unión Europea ya instó al Gobierno de España a usar en mayor medida las desaladoras. De hecho la propia UE invirtió en ello. Además, hace una semana se conoció que el Mapama, ante la seguía, destinará 11,4 millones para hacer obras «de emergencia» en seis desaladoras de Murcia y Alicante para que produzcan más.
Los ejes fundamentales del pacto nacional del agua
En la ronda de contactos que el Gobierno de Rajoy de la mano del Mapama está llevando acabo, pretenden conocer las opiniones tanto de los partidos políticos, como de las comunidades autónomas, y también de los usuarios y los agentes sociales, como ecologistas o sindicatos.
El objetivo es recoger las propuestas de aquí hasta el final de 2017 para lograr tener casi perfilado el proyecto de cara al verano del 2018.
Además del eje de satisfacer todas las demandas que hay a lo largo y ancho de España, hay otros aspectos fundamentales que abordar en el acuerdo nacional por el oro líquido.
El segundo eje son los objetivos ambientales, con la depuración del agua y el caudal hidrológico de los ríos como escenarios principales. De especial preocupación para el Gobierno, y que también afecta a Castilla-La Mancha, es el estado del Tajo, y también del Ebro.
Sin salir de la temática ambiental, el Ejecutivo anda en busca de establecer una líneas generales para preservar espacios emblemáticos de cada región, y que cada territorio gestionaría a raíz de estas líneas generales.
Los planes de sequía también preocupan. Luengo asegura que «tienen mucha importancia porque suponen una regulación de las situaciones de sequía». Para intentar «un consenso» seguirán manteniendo contacto con el Ministerio.
Por último, tanto los planes de inundaciones urbanas, sobre la que se quiere realizar una guía de buenas prácticas, como la gobernanza con respecto al agua, ocuparán la agenda y protagonismo dentro del futuro pacto nacional del agua.
De momento es una primera toma de contacto, las negociaciones tanto con Castilla-La Mancha como con el resto de regiones se seguirán produciendo para intentar lograr un acuerdo en un tema que suscita polémica.