Desde el hospital de Almansa se dio el aviso de que una mujer había sufrido un ataque sexual. D.G.A., de 49 años, manifestaba haber sido víctima de una agresión sexual. La Guardia Civil de esta localidad comenzó a investigar el caso.
D.G.A. denunció la agresión y narró cómo había sucedido la supuesta agresión por parte de un hombre que, según indicaba, tenía intenciones de abusar sexualmente de ella.
Los agente comenzaron a sospechar que se podría tratar de un engaño tras comprobar contradicciones entre el testimonio de la denunciante y de diversos testigos. Además, las pruebas encontradas en el supuesto lugar de los hechos dieron pie a la comprobación de que la denuncia era falsa.
Acto seguido, se conoció que la intención de la mujer era perjudicar al denunciado, ya que pensaba que pensaba que el hombre al que denunció estaba manteniendo algún tipo de relación con la pareja sentimental de la denunciante y ahora acusada de un supuesto delito de simulación.