El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, no se plantea ser secretario general del PSOE, aunque no le «hace ascos» a entrar en la Ejecutiva Federal y ha considerado que quien ocupe el cargo no tiene que ser necesariamente diputado, al igual que «Papa puede ser alguien que ni siquiera es cardenal».
García-Page ha afirmado hoy en una entrevista en la emisora ABC Punto Radio que no se ve como número uno del PSOE, a pesar de que le están preguntando si no descarta serlo y de que ha habido dirigentes como Elena Valenciano que han dicho que el partido le tiene que tener en cuenta en el futuro.
El también secretario general del Partido Socialista de Toledo ha aclarado: «no puedo descartar nada que ni siquiera me planteo, porque hoy sinceramente creo que hay bastante gente que reúne más condiciones para tener la secretaria general del PSOE que yo».
«Evidentemente no es falsa modestia, estoy comprometido con mi ciudad, soy alcalde de Toledo y no lo voy a dejar de ser salvo que me echen y eso no sólo me condiciona sino que además marca mis prioridades», ha añadido.
No obstante, ha reconocido: «no le haría ascos a tener responsabilidades en el ámbito federal», en relación a su posible entrada en la Ejecutiva Federal del PSOE.
En cuanto a la cuestión de si el secretario general del PSOE debe de ser diputado, García-Page ha dicho que si bien es «una ventaja práctica y táctica esencial para dirigir la oposición», no hay que llevar esta condición «al extremo», porque si así fuera «nos podríamos ahorrar el congreso».
«Estamos viviendo una situación excepcional, de manera que quizás puede haber mucha militancia que rechace incluso los criterios endogámicos: sólo pueden estar unos poquitos, digamos que Papa puede ser alguien que ni siquiera es cardenal aunque no suele pasar», ha aseverado García-Page.
A su juicio, algo similar «puede pasar también en el Partido Socialista», aunque ha puntualizado: «pero no es mi caso».
«No me veo ni me dejo de ver en ningún sitio, pero yo si me veo opinando», ha señalado García-Page, quien ha recordado que lleva 25 años en política, más años militando en política que fuera de ella («y no estoy muy loco del todo, que esto entontece mucho», ha bromeado) y ha advertido que no va a estar callado «con lo que está cayendo en mi partido».
En este sentido, piensa que «para abordar un proceso de reconversión y reformulación política el PSOE necesita más tiempo y más distancia», ya que «no se puede olvidar que el congreso se va a celebrar en plena crisis económica».
García-Page ha indicado que tiene ideas, pero que «ninguna está cerrada» y ha considerado: «a estas alturas hay que tener la sencillez y la humildad de reconocer que quedan muchas claves por despejar y muchas piezas del puzzle por colocar».
«Acabamos de llevarnos un golpe muy grande y hacer ejercicio físico al mismo tiempo que se hace la digestión es complicado», ha agregado el alcalde socialista de Toledo.