La secretaria general de Asuntos Sociales y Voluntariado, Paloma Leis, y el director general de Mayores, Personas con Discapacidad y Dependientes, Juan José García Ferrer, visitaron la sede central de la entidad financiera para conocer in situ el trabajo de digitalización documental de siete jóvenes.
La secretaria general de Asuntos Sociales y Voluntariado de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales, Paloma Leis, y el director general de Mayores, Personas con Discapacidad y Dependientes de este Departamento del Gobierno regional, Juan José García Ferrer, visitaron hoy la sede central de Caja Rural Castilla-La Mancha para conocer in situ el proyecto de inserción laboral de siete personas con capacidades diferentes llevado a cabo por la cooperativa de crédito.
Estos jóvenes forman el servicio de digitalización documental de Caja Rural Castilla-La Mancha, en base a un convenio de colaboración con el Centro de Capacitación Cecap y el Centro Especial de Empleo Futurvalía.
Los responsables de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales apoyaron y admiraron el trabajo de estos jóvenes y sus valores como compromiso en el trabajo, agradecimiento a aquellos que les han dado una oportunidad, capacidad de esfuerzo frente a tareas que les son complejas, compañerismo sin límites y buen humor.
Según Leis y García Ferrer, «fomentar el empleo de las personas con capacidades diferentes es fundamental para su integración social».
En su visita a Caja Rural Castilla-La Mancha, los responsables de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales estuvieron acompañados por la directora de Recursos Humanos de la entidad, Paloma Gómez; el secretario general, Juan Antonio Bernácer, y la directora de la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha, Paloma García-Tizón.
Esta iniciativa responde al compromiso de Caja Rural Castilla-La Mancha y su Fundación a favor de la inserción social y laboral de las personas con capacidades diferentes.
Fue el primer proyecto europeo en el que personas con discapacidad intelectual utilizaban la herramienta informática como instrumento laboral, de una manera absolutamente eficiente y sin apenas margen de error.
La experiencia ha marcado un antes y un después en la inserción socio-laboral de personas con capacidades diferentes, ya que los resultados han demostrado que pueden realizar trabajos de máxima complejidad con absoluta eficiencia.
Han pasado de ser personas dependientes, necesitadas de ayuda, a ser personas útiles que sirven a la comunidad que les rodea.
Pero los efectos positivos no solamente se han comprobado en ellos y sus familiares, sino también en el resto de los trabajadores de Caja Rural Castilla-La Mancha, quienes han trasmitido la enorme satisfacción que les supone tenerles de compañeros.
Las cualidades de estos jóvenes han aportado valor añadido a Caja Rural Castilla-La Mancha y han servido para eliminar creencias erróneas sobre el rendimiento de las personas con capacidades diferentes.
Los representantes de Sanidad y Asuntos Sociales también mantuvieron una reunión con los responsables de la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha a fin de estudiar líneas de colaboración conjunta en el ámbito de las capacidades diferentes.