El Juzgado número 3 de Albacete ha admitido a trámite el concurso de acreedores que UGT ha interpuesto contra la empresa Transaltozano, adjudicataria del transporte sanitario del Sescam, como medida de seguridad para que los trabajadores, casi 1.000, puedan cobrar sus salarios.
Según la Federación de Transportes y Comunicaciones de UGT en Albacete, este concurso de acreedores supone «un nuevo varapalo judicial» y limita a la empresa en sus actuaciones, sobre todo a la hora de dejar sin pagar sus deudas.
UGT subraya que el concurso de acreedores contra Transaltozano es una medida de seguridad para que sus casi 1.000 trabajadores puedan cobrar sus salarios y la empresa no desaparezca adeudándoles varios sueldos.
El objetivo es «no poner en riesgo los millones de euros que debe Transaltozano tanto a trabajadores como a las administraciones», según el comunicado, que cita a la Seguridad Social, Hacienda y el Sescam.
UGT destaca de la empresa «su límite de endeudamiento insoportable, su mala gestión inconcebible e insostenible, los despidos inaguantables».
Una vez se inicie el concurso de acreedores, UGT confía en que el Juzgado realice las diligencias oportunas para que los trabajadores puedan cobrar sus deudas.
La empresa puede presentar alegaciones al concurso de acreedores, pero si finalmente se declara el concurso se suspenderá el ejercicio de las facultades de administración y disposición sobre su patrimonio y serán sustituido por administradores concursales.