Por este motivo nace el Observatorio, cuya andadura se inicia con al objetivo de homogeneizar los criterios en las distintas gerencias con respecto a la prevención y actuación que se realiza cuando sucede uno de los caso de agresiones a sanitarios. El propósito final es conseguir que evitar o minimizar el número de incidentes, tal y como ha informado el Gobierno de Castilla-La Mancha en un comunicado de prensa.

En este sentido, la directora gerente del Sescam ha explicado el Observatorio quiere conocer, analizar y evaluar situaciones de riesgo de agresiones al personal del Sescam, así como proponer actuaciones de prevención en intervención para la mejora de la relación entre profesionales y usuarios.

Asimismo, pretende mejorar la normalización de las comunicaciones e interacción entre trabajadores y trabajadores y usuarios mediante la prevención de conductas y actos agresivos y la mejora del clima laboral.

«Nuestro objetivo es que sirva de foro de diálogo entre administraciones y otros representantes de la sociedad en orden a asegurar una participación activa para prevenir las agresiones», ha asegurado la directora gerente del Sescam.

Formación para los profesionales y agilización en las actuaciones

Entre las funciones del Observatorio se encuentra promover la realización de planes de prevención y procedimientos para actuar frente a situaciones de conflicto y agresión, minimizar tiempos de respuesta y establecer mecanismos de prevención, así como evaluar el nivel de aplicación, desarrollo y eficacia de los mismos.

Asimismo, realizará estudios que permitan un mejor conocimiento de la situación de las agresiones, así como llevar a cabo un análisis de los mismos para proponer mejoras en los procedimientos de actuación.

Igualmente, impulsará planes de información y formación dirigidos a los profesionales del Sescam, que incluyan la metodología de actuación preventiva ante la violencia, el trato correcto y comunicación entre profesionales y usuarios.

Otra de las vertientes de actuación será la promoción de foros y encuentros entre profesionales y expertos para facilitar el intercambio de conocimientos, trabajos y nuevas iniciativas en esta materia, así como formular propuestas de convenios, acuerdos o protocolos de actuación a nivel regional con otras entidades u organismos públicos con competencias en la materia.

También se encargará de proponer mejoras generales en relación a procedimientos del Plan Perseo, el plan específico con el que cuenta la Comunidad Autónoma desde hace más de una década para combatir y erradicar la violencia hacia los profesionales sanitarios, desde la sensibilización, prevención y la formación.

Vía libre al Gabinete Jurídico de la Junta para actuar

El órgano también nace con vocación de actuar en el caso de que se produzca la agresión. El Consejo de Gobierno ha aprobado un acuerdo por el que se autoriza al Gabinete Jurídico de la Junta a personarse como acusación particular en todas las agresiones físicas a profesionales sanitarios.

Según ha explicado Leal, hasta ahora, cada vez que se producía un hecho de estas características, era preceptiva la tramitación del correspondiente expediente individual por el Consejo de Gobierno. La exigencia de este requisito previo podría llegar a hacer imposible el ejercicio de la acción penal por haberse celebrado el procedimiento de juicio rápido con anterioridad a que se emita la autorización del Consejo de Gobierno.

Para evitar que esto sea así, y posibilitar un funcionamiento más ágil en la defensa de los profesionales del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, se ha estimado oportuno una autorización genérica del Consejo de Gobierno que permita al Gabinete Jurídico el ejercicio en vía judicial de las acciones precisas, en calidad de acusación particular, en todos los casos de agresiones físicas a profesionales del sistema sanitario público regional.

A la reunión de constitución del Observatorio de la Violencia han asistido, entre otros, el subdelegado del Gobierno en Toledo, Fernando Sanz, los presidentes autonómicos de los Colegios Profesionales de Médicos y Enfermería, José Molina y Roberto Martín, respectivamente, así como representantes de varias organizaciones sindicales.