El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha pedido hoy al Gobierno central que renuncie a construir el almacén de residuos nucleares (ATC) en Villar de Cañas (Cuenca) y ha alertado de que si no ocurre así, «solo se puede entender que hay razones inexplicables» para mantenerlo.
En declaraciones a los medios de comunicación durante su visita al hospital de Alcázar de San Juan (Ciudad Real), García-Page ha celebrado la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha que rechaza el recurso del Ayuntamiento de Villar de Cañas contra la anulación del Plan de Ordenación Municipal de la localidad, decretada por la Consejería de Fomento del Ejecutivo castellano-manchego.
«Pido con claridad que renuncie y abandone el ATC de Villar de Cañas, porque a estas alturas solo puede significar un derroche de tiempo y de miles de millones de euros para las arcas públicas», ha afirmado García-Page, que ha cifrado el gasto en «9.000 ó 10.000 millones de euros».
Para el presidente autonómico, la sentencia, al avalar la anulación del POM, supone que «no se pueden dar licencias» para la construcción del ATC, por lo que ha alertado de que «cualquier otra cosa sería prevaricar».
«Alguien tiene que tomar la decisión de abandonar esto. No me cabe la cabeza que un proyecto de esta naturaleza se haya hecho jugando con los intereses de los españoles y la seguridad y se haya hecho sin medir la distancia que hay con las viviendas afectadas», ha afirmado García-Page.
De este modo, ha hecho alusión a que la sentencia del TSJCM especifica que «en la redacción del POM no se había tenido en cuenta dicha instrucción que exige que la medición de los 2.000 metros se realice desde la zona de afección de la edificación y no desde la fachada de las instalaciones nucleares».