«Formalmente hablando, un 24 de septiembre de 1948 se inscribió en la Delegación Comarcal de Fútbol, entonces dependiente de la Federación Castellana, el que se llamó C.F. Calvo Sotelo, actual C.D. Puertollano. Se cumplen, por tanto, 64 años del nacimiento del que es el club deportivo más antiguo de la ciudad de Puertollano.
A nadie se le escapa que este cumpleaños llega en un momento muy difícil para la entidad, si me apuran el más difícil de su ya larga historia, esa a la que muchos ciudadanos y ciudadanas de nuestro pueblo nos aferramos para que no desaparezca nunca, y esperamos no tener que pedir perdón por ello. Ahora mismo más de 900 socios en una situación tan delicada demuestran que lo que se acaba de afirmar es cierto. Más de 900 socios que quieren seguir enarbolando la bandera azul que han amado siempre y que no quieren que sea enterrada nunca, al menos mientras haya un hálito de vida por el que seguir luchando. Más de 900 socios que merecen, por lo menos, el respeto que se debe a los que defienden sus sentimientos, a los que ponen su corazón en la pelea. Más de 900 socios que han comprobado cómo la debilidad que ha atenazado al club de sus amores ha permitido ponerlo al borde de un precipicio, impunemente, y que han dicho ¡basta!
Y así ha sido porque desde el pasado 15 de julio en el que 181 manos se alzaron casi unánimes para decir ¡adelante!, y el presidente Guillermo Fernández Moya se puso al frente, se ha acabado ese club indefenso, sometido a los vaivenes de aquellos que han querido zarandearlo a su antojo. Y es que, desde hace muchos años, Puertollano es una ciudad de fútbol, con un buen paladar, acostumbrada a degustar buenos platos. Así que, antes que ver fútbol en una categoría ínfima y sin atractivo que valga, los socios azules han preferido seguir adelante tratando de reconstruir de sus cenizas a este club histórico, el que más historia guarda de toda la provincia de Ciudad Real, cosa que han tenido bien presente los que verdaderamente aman los colores azules.
Desde luego no va a ser una tarea fácil, pero somos muchos los que hemos confiado en Guillermo Fernández, un hombre que encarna ahora mismo lo que debe ser la defensa de esta entidad, un hombre que, aún no viviendo en Puertollano, mantuvo su condición de socio, demostrando que cuando algo se lleva en la sangre, se lucha por ello hasta la extenuación.
En esta situación cumplimos 64 años y el esfuerzo para salir adelante tiene que ser de todos los que sentimos de verdad que hay que intentar con todas nuestras fuerzas evitar que esta llama se apague. Así que este cumpleaños no puede pasar sin que agradezcamos a todas las personas que han aportado algo, que lo hayan hecho. Pero que no olvide nadie lo principal: sin la fuerza que han insuflado los socios nada habría sido posible. Así pues, ahora mismo, ellos son los verdaderos dueños del club, a los que hay que mimar y cuidar porque sin este patrimonio no hay futuro.
Esperemos que el tiempo pase para ir normalizando la vida de la entidad, y que la pelotita entre en las porterías rivales para que la ilusión pueda seguir manteniéndose. Mientras tanto, permítasenos celebrar en paz nuestro 64 cumpleaños. Tenemos derecho todos los que hemos apostado por ello, que, por cierto, hemos sido bastantes, tantos como que no hay en este momento otra sociedad puertollanera con tanto apoyo social. Que nadie lo olvide. ¡Viva el Club Deportivo Puertollano y ojalá que cumpla muchos años más!»
Luis Pizarro Díaz es expresidente del CD Puertollano