El sindicato CSI.F ha anunciado hoy «guerra» en el sector sanitario si se mantienen los recortes anunciados en los presupuestos del 2013, que ha considerado «un ataque frontal y despiadado» a los profesionales del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam).
El presidente sectorial de CSI.F Toledo, Jorge Curiel, ha anunciado en nota de prensa que los recortes en los sueldos de los empleados del Sescam son «la ruptura total y absoluta de cualquier tipo de negociación y el incendio de la sanidad» en la comunidad.
CSI.F, por lo pronto, ha convocado una concentración mañana, a las 11.30 horas, a la puerta del Hospital Nuestra Señora del Prado de Talavera, porque considera que el borrador de los presupuestos del 2013 supone «un robo descarado a la cartera» de los trabajadores del Sescam, a los que se trata «a patadas y latigazos, con sueldos de miseria».
Según el CSI.F, los presupuestos 2013 en el Sescam confirman «la pésima gestión de los dirigentes regionales de la sanidad», así como «el fracaso de la política de ahorro basada en el despido de profesionales, recorte de sueldos y demolición de los recursos de la sanidad».
En el comunicado ha avanzado que «si no se cuenta con los profesionales para mejorar los defectos e ineficiencias del sistema, el fracaso está garantizado» y ha alertado de que «la sanidad no es viable si se aparta a los profesionales, no se planifica con ellos».
CSIF se ha ofrecido al Consejero de Sanidad para colaborar y «analizar las bolsas de ineficiencia y corregirlas cuanto antes», pues ha reconocido que «se malgasta mucho por la descoordinación y la falta de planificación y protocolización de los procesos».
Ha opinado, en este sentido, que la solución no pasa por despedir profesionales y cerrar camas, que contribuyen a aumentar las listas de espera y a «esclavizar a los profesionales sanitarios».
CSI.F ha exigido «anular los recortes que figuran en el proyecto de presupuestos» y abrir vías de diálogo, pues «de lo contrario entenderemos que la apuesta del gobierno es la confrontación con sus trabajadores, y no quedará sin respuesta».