Dos personas han sido detenidas, y otras cuatro están siendo investigadas, por la caza furtiva de al menos 43 ciervos y dos gamos en terrenos que están sometidos a un régimen cinegético especial y sin el correspondiente permiso de su titular. Además, para la comercialización de la carne de caza obtenida habían utilizado documentación supuestamente falsa.
La operación puesta en marcha por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de la provincia de Cuenca se denominó «Tuberciervo», tal y como ha informado la Dirección General de la Guardia Civil.
Podrían estar involucrados en la comisión de un delito relativo a la protección de la flora y la fauna, otro contra la salud pública, uno más de falsedad documental y otro de desobediencia.
Caza furtiva y comercialización ilegal de la carne
Fueron tres meses de investigación y los dos detenidos, según las mismas fuentes, habrían faltado a la verdad en la narración de los hechos expuestos en los documentos utilizados para la comercialización de las 45 piezas de carne de caza. De hecho, supuestamente la introdujeron en el mercado sin cumplir con los condicionantes exigidos por la normativa.
Una operación que llevaron a cabo el Seprona de Cuenca y de Cardenete y que contó con la colaboración de la Sección de Control e Higiene Alimentaria del Servicio de Salud Pública y Consumo de la Dirección Provincial de la Consejería de Sanidad en Cuenca y de la Sección de Caza de la Dirección Provincial de la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Cuenca.