«Encuentros literarios» es el título del nuevo ciclo que dará comienzo el 4 de abril en la Biblioteca de Castilla-La Mancha, en Toledo, una cita en la que autores de reconocido prestigio hablarán de su obra y dialogarán con los usuarios y lectores.
Según informa la Biblioteca en nota de prensa, el ciclo arrancará con Sabino Méndez; el 19 de abril continuará con Chris Stewart; y en mayo contará con la presencia de Luis Landero.
«Curiosamente los tres primeros escritores que nos visitan tienen un insospechado nexo común y es que los tres fueron músicos en su juventud», indica la Biblioteca. Así, Sabino Méndez fue fundador con Loquillo del grupo Loquillo y los Trogloditas, siendo el principal compositor de la banda en su época y responsable de canciones legendarias como «Cadillac solitario», «Rock and roll star», «El ritmo del garaje»…; Chris Stewart fue el primer batería del mítico grupo Genesis, con el que grabó dos singles; y Luis Landero fue guitarrista de flamenco, incluso llegó a salir en TVE en alguna ocasión, como cuenta en su libro «El balcón en invierno».
En su faceta literaria Sabino Méndez (Barcelona, 1961) es el autor de un ramillete de canciones del rock español que han accedido a la categoría de clásicas. A finales de los años 80, en la cima de su fama, abandonó la guitarra eléctrica y el grupo en el que tocaba (Loquillo y Los Trogloditas) para dedicarse exclusivamente a los libros. Estudió Filología y sorprendió con su debut «Corre, rocker» (2000), alabado por crítica y público, al que siguieron «Limusinas y estrellas» (2003) y «Hotel Tierra» (2006). Después publicó «Historia del hambre y la sed». En 2017 publica la novela «Literatura universal», su obra más ambiciosa. Sigue tocando y componiendo ocasionalmente.
[ze_summary text=»Autores de reconocido prestigio hablarán de su obra y dialogarán con los usuarios y lectores»]Autores de reconocido prestigio hablarán de su obra y dialogarán con los usuarios y lectores[/ze_summary]Chris Stewart, por su parte, es un autor inglés que se hizo muy conocido internacionalmente por su primera obra «Entre limones» (Driving Over Lemons: An Optimist In Andalucia, 1999). De vocación aventurera, fue batería del conocido grupo británico Genesis, músico en un circo, esquilador en Suecia o aprendiz de piloto en los Estados Unidos. Cuando decide asentarse con su familia elige la comarca granadina de Las Alpujarras, y allí compra un cortijo llamado «El Valero». Sus peripecias vitales en el cortijo son el eje de su obra, que comienza con «Entre limones», que tuvo un enorme éxito, sobre todo en su país. Con un gran sentido del humor y optimismo va relatando cómo se enfrenta a las dificultades de poner en marcha la finca y describiendo una galería de singulares lugareños con los que se va relacionando. Sus obras publicadas son: «Entre limones: historia de un optimista» (2006), «El loro en el limonero» (2006), «Tres maneras de volcar un barco» (2010), «Los almendros en flor» (2011) y «Los últimos tiempos del Club del Autobús» (2015).
Por último, Luis Landero -que procede de una familia campesina- pasó los primeros años de su vida en su localidad natal, Albuquerque, y en la finca familiar, hasta que la familia se traslada a Madrid. Comenzó a trabajar a los 14 años en diversos oficios: aprendiz en un taller mecánico, recadero, auxiliar administrativo, etc., y junto a su primo fue guitarrista acompañante de flamenco durante algunos años. Y cuando descubrió la lectura y los libros, cambió su vida. Estudió Filología Hispánica en la Universidad Complutense de Madrid y fue profesor de Lengua y Literatura españolas en diversas instituciones.
Su primera novela, «Juegos de la edad tardía» (1989), tuvo un gran éxito y le permitió dedicarse a la escritura de una obra que está impregnada de reminiscencias cervantinas y en la que destaca también su cuidado lenguaje y su calidad literaria.
Tiene publicadas ocho novelas, la última «La vida negociable» (2017) y otras obras narrativas entre las que destaca «El balcón en invierno», una magnífica autobiografía.
Cuenta con numerosos premios que reconocen su valía literaria, entre los que podemos destacar el Premio Nacional de Literatura (1990), el Premio Mariano José de Larra (1990), el Premio Libreros Madrid (2015) y el Premio Dulce Chacón de Narrativa española (2015).