En el marco de las tareas policiales contra el tráfico de droga, agentes de Policía Nacional, adscritos a la Comisaría Local de Puertollano (Ciudad Real), iniciaron una investigación, a mediados del mes de agosto, tras detectar una plantación de marihuana en un cercado próximo a una vivienda del extrarradio de la localidad.
Tras numerosas gestiones, vigilancias y seguimientos, se llegó a la identificación de los moradores de la vivienda y de otras personas de la barriada, 11 en total, pertenecientes a un clan familiar, dedicados, presuntamente, al negocio ilícito de la droga.
La plantación de marihuana estaba perfectamente camuflada, simulando un huerto familiar, en un terreno anexo a una de las casas, vallado y cubierto con una malla de ocultación, perfectamente cerrado y bajo vigilancia las 24 horas del día. Varios perros de presa alertaban de la presencia de intrusos o curiosos y prevenían eventuales robos en la plantación, que, curiosamente, ocupa, ilegalmente, un terreno público de la ciudad.
Con la preceptiva autorización judicial, se llevó a cabo un minucioso registro en la vivienda y sus anexos, incautándose un número importante de plantas de cannabis, con un peso aproximado de 140 kilogramos. Algunas de estas plantas ya habían sido recolectadas y se encontraban en un local destinado a secadero, preparadas para su transformación, mediante picado, «en marihuana», que era la forma habitual de venta. Con ellas podrían haberse sacado más de 40.000 dosis al mercado negro.
Con la detención de las 11 personas que se relacionan, se ha conseguido desarticular un grupo perfectamente organizado en el tráfico ilícito de drogas, que operaba en Puertollano y su comarca, así como erradicar un importante punto de cultivo y distribución de marihuana.
Los detenidos, junto con las diligencias instruidas, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia, de Puertollano, que decretó su libertad con cargos. Se incautaron varias plantas de marihuana con un peso total de 140 kilogramos.