Quién no ha visto alguna vez un solar en construcción sin construir. Cuántos meses pueden pasar hasta que empiecen las obras. O zonas verdes descuidadas. O edificios abandonados. Probablemente todos aquellos que lean esta noticia. Sin embargo, tres mujeres, tres castellanomanchegas, lo han visto, han pensado en la solución y ahora es su trabajo.
Marta Castro y su hermana Ana junto con Paloma Escorial hablaban en muchas ocasiones de los «puntos negros» que existen en las ciudades. De esos espacios «descuidados» que suelen estar «mal resueltos» y se planteaban, entre ellas, las soluciones. Ana y Paloma son arquitectas y Marta, licenciada en Administración y Dirección de Empresas.
Cuando vieron la primera convocatoria de Desafío 22, la plataforma de creación de empresas innovadoras de la Fundación Horizonte XXII de Globalcaja, decidieron apuntarse para probarse a ellas mismas si esa idea que les rondaba tenía posibilidades de negocio o no.
Su propuesta es sencilla. A través de una serie de paneles esos espacios dejan de estar desaprovechados y les dan vida. Además apuestan por paneles que posteriormente su pueden reutilizar para otro espacio e incluso se pueden mover e intercambiar. En definitiva, se trata de apostar por una arquitectura más temporal con la que resolver esa situación puntual.
La idea gustó en Desafío 22, donde consiguieron todas las herramientas necesarias para constituirse como lo que son hoy en día, una empresa.
EL SALTO A CHINA
Estrategias Urbanas tiene prácticamente dos años de vida y, hace apenas unos meses, ha conseguido un contrato para desarrollar la imagen de una franquicia de cafeterías y vinoteca en Guangzhou (China).
Ana destacaba a Encastillalamancha el interés que hay en China por la cultura del café, al tiempo que también «les gusta mucho el tema de las franquicias». De hecho, Starbucks y Costa Coffe son todo un éxito. A ellas se sumará esta franquicia, desarrollada por un cartagenero David Hernández Zapata quien ha confiado en la profesionalidad de las emprendedoras castellanomanchegas para desarrollar este proyecto.
Por su experiencia, Ana anima a aquellos que tengan una idea a lanzarse, incluso siendo consciente de que han vivido momentos difíciles, cuando la moral se cae… pero «cuando se consigue materializar la idea, el subidón es proporcional».