Un centenar de personas ha esperado, algunas desde las cinco de la madrugada, ante la oficina de Turismo de la Plaza de Zocodover de Toledo para conseguir una de las 2.000 sillas para la procesión del Corpus Christi de ciudad, que este año será el jueves 31 de mayo.
A las diez de la mañana ha abierto esta oficina de turismo, conocida como Casa del Mapa, donde el Ayuntamiento de Toledo ha puesto a la venta 2.000 sillas, y, además, otras 500 pueden adquirirse a través de Internet.
Las sillas del Corpus, ese objeto de deseo
Algunos ciudadanos han estado esperando desde las cinco de la madrugada, entre ellos Andrés que ha explicado a Efe que aunque va a desfilar en la procesión con la Cofradía Internacional de Investigadores ha aguardado ese tiempo para que su esposa pueda ver la procesión desde el Arco de Palacio.
«Zocodover es muy popular pero allí hay otro recogimiento», ha explicado en referencia a su preferencia por la zona de Arco de Palacio.
También ha destacado que cuando la procesión llega a esta zona cercana a la Catedral Primada «empieza a tener otra sensibilidad» ya que el Arco de Palacio es un espacio en el que la procesión adquiere «gran vistosidad», pasa junto a los tapices situados frente al Arzobispado: «tiene su enjundia y además es un lugar emblemático», ha agregado.
Pilar también lleva desde las cinco y media de la madrugada en la fila, y ha señalado a Efe que confía en tener silla para poder ver la procesión desde la calle Comercio, aunque no sabe si lo conseguirá.
«Luego me darán sillas donde les dé la gana porque no llevan ni orden, ni un concierto», se ha quejado esta toledana, que ha recordado que lleva acudiendo a la procesión del Corpus Christi desde niña, cuando iba «con trajes preciosos y zapatos divinos para ver a Jesús que sale a la calle para ver a los toledanos».
Las sillas que se pueden adquirir en la oficina de turismo se instalarán en la calle Comercio, las plazas de Zocodover y de San Vicente o las zonas de Alfonso X ‘El Sabio’ y Arco de Palacio.
Cada silla tiene un precio de 10 euros y se pueden vender un máximo de 10 sillas por persona.
La fiesta del Corpus Christi de Toledo está declarada de Interés Turístico Internacional y congrega a miles de personas en las calles de la ciudad, en concreto para admirar la Custodia de Arfe, elaborada con el primer oro que llegó de América tras su descubrimiento en 1492.