Joan Linares, el jugador de fútbol sala que puede presumir de ser el único que ha ganado cinco copas de Europa, entre otros muchos entorchados, aún está en activo. Reciente su paso por Zaragoza, positivo desde el punto de vista deportivo y no tanto desde el institucional, aún aguarda la posibilidad de reincorporarse a algún equipo, de España o fuera de ella, pero «sin volverse loco», según sus propias palabras, ya que, a pesar de que tiene muchas ganas de jugar, lo quiere hacer en buenas condiciones. Solo quiere que se cumpla lo estipulado, para que no le ocurra lo de Zaragoza, de donde partió por la falta de compromiso del club, explica.
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¿Puede producirse su retorno a las pistas?
Si surge alguna propuesta, alguna oferta interesante que me convenza, podría seguir jugando. Posibilidades hay, bien es verdad que antes de enero no, cuando se reabra el mercado de fichajes. Mientras, sigo entrenando y preparándome por si surge esa posibilidad.
¿Cómo resultó su experiencia en Zaragoza?
Muy positiva. Fue un año muy bueno, en lo personal y en lo colectivo. Conseguimos clasificarnos para el play-off del título después de bastantes años sin hacerlo, y en lo particular, bien, máximo goleador del equipo con 25 goles, jugando muchísimos minutos y teniendo un rendimiento muy alto.
¿Por qué no siguió?
Había un acuerdo, un compromiso entre todas las partes que ellos no cumplieron, por lo que yo decidí no regresar a Zaragoza y nada más.
¿Cómo ve la liga?
Es un año de transición por los recortes, en el que se ha pasado de 16 a 14 equipos. Ahora mismo la liga requiere a los más fuertes, los más capacitados económicamente, para el año que viene retomar a los 16. Y en cuanto a la liga, la veo como todos los años, con Barça por encima de Inter Movistar y El Pozo Murcia. Estos tres equipos serán los que ganen al final y disputen todos los títulos.
No va a haber sorpresas, pues.
A la hora de la verdad, cuando lleguen los títulos importantes, como la Copa de España, del Rey y la liga, veo al Barça por encima del resto, lo viene demostrando, tiene la mejor plantilla.
Y usted está a la espera de hallar un equipo con garantías y en condiciones, ¿no?
Es lo que miras principalmente, que lo que te ofrezcan se vaya a cumplir. Uno no exige que le den mucho, sino que lo que den se cumpla, y eso ahora mismo es complicado, muchos clubes de Primera División están con retrasos, con problemas económicos. Tampoco me voy a aventurar a lo loco: después de una trayectoria deportiva, si veo que lo que se me propone no me convence, prefiero estar en casa que en cualquier otro sitio.
¿Cómo anda el fútbol sala en otros países? ¿Se pueden comparar a España?
Sí, por supuesto. Ahora Rusia tiene una liga muy potente, ya que la crisis o está afectando. Hay mucho poderío económico, muchos jugadores de primer nivel están jugando allí. O sea, que la gente se decanta por ir al extranjero, no solo a Rusia sino también a otros países. España acusda mucho la crisis y eso hace que tanto técnicos como jugadores emigren al extranjero.
¿Tiene alguna oferta del extranjero?
Algo ha llegado, sí, y lo estoy valorando. Me siento un privilegiado porque llegan cositas, la gente no se olvida de Joan Linares. Es una opción que no descarto. Dejaré que coja forma antes de planteármelo más seriamente.
¿Cómo ve el Mundial?
Abierto. Así como otras veces España o Brasil eran siempre los campeones… Ahora hay más incertidumbre. Jugar tan lejos, en Tailandia… va a ser difícil, aunque España está acostumbrada. Por supuesto quiero que gane el que sería su tercer Mundial pero lo va a tener difícil: selecciones como Brasil, Rusia, Italia y alguna sorpresa que surja… Al día de hoy no tengo un favorito claro.
Uno se pregunta por qué España ha sido una potencia mundial en este deporte…
Ahí están los resultados. Pasa como en el hockey sobre patines o waterpolo. En España se practica mucho fútbol sala, hay muchas fichas, desde muy pequeño se juega en la pista del colegio y eso hace que salgan muy buenos jugadores. Y España ha sabido crecer con el paso del tiempo, los técnicos se han formado. Solo hay que ver el currículum de España; en cuanto a clubes y a la selección, es una potencia a día de hoy.
Pero el fútbol sala no se libra de la crisis…
Está afectando como a cualquier otro deporte u a otro sector de la vida cotidiana. Desde hace unos años el fútbol sala no es lo que era, porque o caes en los equipos grandes o no puedes vivir de este deporte como en años anteriores. Ahora vivimos una transición a la espera de la llegada de tiempos mejores.
¿Cómo empezó a jugar?
Yo siempre he jugado al fútbol sala, en la pista de colegio. Luego pasé a una escuela deportiva más grande del barrio, pasé a la etapa juvenil y me llegó la oferta del Barça para jugar en Primera con 18 años y hasta el día de hoy, tras 20 años de carrera profesional.
¿Se queda con algún momento de entre los muchos buenos que le ha dado el fútbol sala?
Hay dos: el Mundial de Guatemala, en el año 2000, la primera estrella, el primer Mundial para nuestro deporte. Fui un privilegiado. Es lo máximo a lo que puede aspirar un jugador de fútbol sala, jugar un Mundial, ya que no es un deporte olímpico. Y representar a tu país vistiendo la camiseta de la selección nacional, eso es lo más grande para un deportista. Y también mi primera liga, en el Castilla-La Mancha Talavera, en la temporada 1996-97, fue mi primer título. Recuerdo un Primero de Mayo volcado, una ciudad de Talavera entregada a su equipo. Estos han sido los dos momentos más importantes de mi carrera deportiva junto con las cinco copas de Europa que tengo a nivel de clubes, ya que ningún jugador tiene tantas como yo.