Un juzgado de Guadalajara ha admitido a trámite la demanda de nulidad sobre la ejecución hipotecaria que pesa sobre Isidro Villalba, el pensionista de Almoguera que mantenía sin saberlo una deuda de 2.600 euros sobre su hipoteca con Ibercaja y cuyo desahucio ha sido suspendido a petición de esta entidad bancaria.
Isidro Villalba, un pensionista analfabeto de más de 60 años, delegó en su hijo los asuntos administrativos cuando falleció su esposa en 2005 y comenzaron los impagos y atrasos en la hipoteca, que acabaron con la ejecución de la misma, sin haber recibido notificación de ello, según ha alegado.
Ahora, la abogada del afectado, Carolina Borreguero, ha informado a Efe de que el juzgado de instrucción número 2 ha admitido su demanda en la que acusa a Ibercaja de haber cometido varias «irregularidades» en el proceso de ejecución de la hipoteca de Isidro.
Entre ellas está, según ha señalado, la falta de notificación directa al afectado de la deuda que mantenía, lo que «impidió que el día de la subasta pudiera consignarla y recuperarla», así como las relacionadas con el seguro de vida de su mujer, fallecida en 2005, una póliza que hubiera cubierto el capital pendiente del préstamo hipotecario y que «ahora la entidad financiera no reconoce».
La letrada ha especificado que este tipo de procesos son muy complejos y ofrecen «muy pocas garantías de defensa a los afectados».
De hecho, ha señalado que aún en caso de anulación de la ejecución hipotecaria tendrían que demostrar que el poseedor de la vivienda actual -en este caso una inmobiliaria participada por Ibercaja- «no es de buena fe» para recuperarla.
En este sentido, ha avanzado que sus pretensiones son que Isidro recupere la vivienda, se le pague una indemnización por daños morales y se reconozca el seguro de vida de su esposa para cubrir el capital pendiente de la hipoteca, que serían unos 19.500 euros.
Una vez admitida la demanda, Ibercaja tiene un plazo de veinte días para presentar alegaciones.
Fuentes de la entidad financiera han indicado a Efe que aún no han recibido la notificación del juzgado, por lo que no pueden valorar el contenido de la demanda presentada y han evitado «polemizar» con el afectado.
En cualquier caso, han recordado que Ibercaja es «una entidad especialmente sensible» ante este tipo de casos y ya ha mostrado su buena voluntad instando al juez a suspender el desahucio de Isidro, ofreciéndole varias opciones para que recupere su vivienda en condiciones similares a las que tenía antes de la ejecución hipotecaria -bien adquiriéndola con una nueva financiación o con un alquiler con derecho a compra-.