La tasa de riesgo de pobreza en Castilla-La Mancha alcanzó el 28,1 por 100 en 2017, según la Encuesta de Condiciones de Vida publicada este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De esta manera, la región fue la quinta con un índice mayor en esta tasa.
Este indicador, explica el organismo, no mide la pobreza absoluta, sino cuántas personas tienen bajos ingresos en relación al conjunto de la población.
Además, esta encuesta señala que los ingresos medios por persona en la comunidad autónoma fueron de 9.045 euros, lo que significa que es la cuarta con este indicador más bajo de España.
En cuanto a las dificultades económicas en los hogares castellano-manchegos, el 39,5 por 100 no puede permitirse irse de vacaciones fuera de casa al menos una semana al año, mientras que el 41,7 por 100 reconocía no tener capacidad para hacer frente a gastos imprevistos, 4,3 por 100 tenía retrasos en los pagos relacionados con su vivienda principal y el 9,9 por 100 admitía tener «mucha dificultad» para llegar a fin de mes.
En cuanto a los datos a nivel nacional el porcentaje de la población residente en España que se encuentra por debajo del umbral de riesgo de pobreza se situó en el 21,6 por 100 en 2017, su nivel más bajo desde 2013.
En 2017, el umbral de riesgo de pobreza para los hogares de una persona -calculado con los ingresos de 2016- se situó en 8.522 euros, un 3,8 por 100 más que el estimado para el año anterior. En hogares formados por dos adultos y dos menores de 14 años, el umbral fue de 17.896 euros.
Por grupo de edad, la tasa de riesgo de pobreza bajó 1,4 puntos en el grupo de 16 a 64 años, hasta el 21,9 por 100, y se redujo ocho décimas entre los menores de 16 años, hasta el 28,1 por 100. Por el contrario, aumentó en casi dos puntos entre los mayores de 65 años, hasta el 14,8 por 100.
No obstante, al considerar en el cálculo de la tasa de riesgo de pobreza el valor de la vivienda en la que reside el hogar, cuando esta es de su propiedad o la tiene cedida gratuitamente, la tasa de riesgo de pobreza cae hasta el 8,9 por 100 entre los mayores de 65 años al ser este grupo el que en mayor proporción es propietario de una vivienda. Por el contrario, la tasa de riesgo de pobreza más alta cuando se incluye el valor de la vivienda corresponde a los menores de 16 años (28,3 por 100).
Teniendo en cuenta todos los grupos de edad, si se considera el valor del alquiler imputado, la tasa de riesgo de pobreza se situó en el 19,7 por 100 en 2017, una décima menos que en 2016.
Atendiendo al tipo de hogar, el 40,6 por 100 de las personas que vivían en hogares formados por un adulto con hijos dependientes a cargo se situaban en riesgo de pobreza en 2017. Las menores tasas de riesgo de pobreza se daban en los hogares sin niños dependientes. En relación con la actividad, el 44,6 por 100 de los parados estaba en riesgo de pobreza, frente al 13,1 por 100 de los jubilados.
Según la nacionalidad, el porcentaje de personas por debajo del umbral de riesgo de pobreza era del 18 por 100 para los españoles, del 39,2 por 100 para los extranjeros de la Unión Europea (UE) y del 52,1 por 100 para las personas cuya nacionalidad no era de un país de la UE.
En cuanto a las tasas de riesgo de pobreza por comunidades autónomas, las más elevadas se dieron en Extremadura (38,9 por 100), Andalucía (31 por 100) y Canarias (30,5 por 100). Por su parte, Navarra (8,3 por 100), País Vasco y La Rioja (9,7 por 100 en ambos casos) presentaron las tasas de riesgo de pobreza más bajas.