Guillermo L.G.H., un profesor talaverano de 56 años, acusado de tres delitos de homicidio al circular en sentido contrario durante casi 10 kilómetros por la autovía A-5 con una tasa de alcoholemia cinco veces mayor que la permitida, ha dicho que «no recuerda nada» de lo ocurrido el 3 de julio de 2007.
Durante la primera sesión de la vista oral celebrada en la Audiencia de Toledo con jurado popular, el acusado, para quien el fiscal pide 15 años de prisión, ha insistido en que no era consciente de que iba en sentido contrario por la autovía Madrid-Badajoz y que pensó que iba de forma correcta por una carretera comarcal cuando veía los coches que venían de frente.
El procesado, en libertad provisional tras haber estado año y medio en prisión preventiva y que sigue dando clase en un centro de Talavera, se chocó de frente a la altura de Maqueda (Toledo) contra un Renault Laguna en el que viajaban un matrimonio de 68 y 67 años con su nieto de tres años que se dirigía desde Madrid a pasar las vacaciones a su lugar de origen.
El kamikaze, natural de Erustes, regresaba desde Santa Olalla a su pueblo natal, donde pensaba pernoctar porque allí ayudaba esos días a su familia con la cosecha de cebada y ha dicho que se había desplazado a Santa Olalla para comprobar el pesaje del cereal.