Lo ha dejado claro para quien tuviera alguna duda: «La decisión la tomé yo, personalmente». Son palabras de Jesús Fernández Vaquero, secretario de Organización del PSOE de Castilla-La Mancha, vicepresidente segundo de las Cortes regionales y, lo más importante, mano derecha de Emiliano García-Page, secretario general del PSOE en la comunidad autónoma.
La «decisión» fue decir que no a la propuesta que en el último Pleno de la Cámara realizó la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, relativa a los sueldos de los diputados autonómicos. Cospedal ofertó al PSOE que sí cobraran todos durante la presente legislatura siempre y cuando ambos partidos se comprometieran a firmar un documento en el que quedara explítico que el sueldo se eliminaría a partir de la próxima, a mediados de 2015.
Vaquero ha argumentado que primero se escuchó la opinión de los 24 diputados socialistas en el «alto» que hicieron para debatir entre ellos y él mismo decidió que «era razonable que no aceptáramos esta propuesta. Porque no es poner un parche, sino profundizar en cuál es la función de los Parlamentos autonómicos».
Y ha reconocido que hubo diputados socialistas, «los menos», que no estaban de acuerdo con decir que no.
También ha aclarado que, como es lógico, se llamó a Page, quien apostó porque fueran los propios diputados quienes tomaran la decisión final «lo que demuestra -recalcó Vaquero- la calidad democrática de nuestro secretario general».
En definitiva, «nuestra postura no podía ser otra que votar que no, porque no aceptamos imposiciones de nadie». Y lo ha vuelto a repetir: «Estamos en contra ahora, dentro de un año, de cinco y de diez, porque lo que queremos es que el parlamento autonómico sea una garantía de control al Gobierno, como así funcionan todos».
Porque según Vaquero, «no queremos solucionar la situación personal de nuestros diputados ni de los del pp que se van a quedar sin sueldo a partir de enero de 2013, sino que se dediquen a trabajar en el Parlamento. O se entiende esto o es muy difícil entender nuestra postura de ayer».
«EL PP PODRÍA HABER DICHO QUE NOS HABÍAMOS VENDIDO POR UN PLATO DE LENTEJAS»
El secretario de Organización socialista ha insistido una y otra vez en que él opinaba que había que decir que no «y eso fue lo que hicimos. Porque aquí cada uno vende lo que quiere y el PP podría haber dicho que nos habíamos vendido por un plato de lentejas».