El talaverano Óscar Rodríguez solo tiene 20 años pero ya conoce cómo es el sabor de marcarle el gol de la victoria al eterno rival. No lo pudo hacer con el Real Madrid, equipo en el que ha jugado en categorías inferiores, pero hizo su debut como goleador en LaLiga Santander frente al FC Barcelona vistiendo la elástica del Club Deportivo Leganés. Y seguro que nunca lo olvidará.

Los «pepineros» remontaron un encuentro que había puesto de cara Coutinho para el conjunto catalán en la primera parte. Primero fue el marroquí El Zhar el que golpeó y después el centrocampista castellano-manchego certificó la remontada en dos minutos aprovechándose de un error de Piqué en el 53 de partido.

Después de un partido en el que lo dio todo reconoció que había sido «el día más vibrante de mi carrera«. No es para menos, no todos los días se marca el gol de la victoria ante el todopoderoso Barça de Messi.

Óscar nació en Talavera, pero ha vivido toda su vida en Los Navalmorales. Toda, hasta que tuvo que abandonar a su familia en busca de un sueño. En su primer año en «La Fabrica», 2009, hacía cada día 300 kilómetros para ir a entrenar a con los cachorros del Madrid, hasta que en la siguiente temporada se fue a vivir con sus tíos.

Debut con el Madrid y cesión al Leganés

Óscar Rodríguez ha sido de los cateranos madridistas que más han destacado en los últimos años. Su gran papel en el Castilla de Solari le llevó a debutar con Zidane hace un año en los dieciseisavos de final de la Copa de Rey contra el Fuenlabrada en noviembre de 2017.

Pero terminó la temporada y el Madrid no le hizo un hueco en la primera plantilla, por lo que se tuvo que salir a otro equipo en busca de minutos en primera. Así aterrizó en el CD Leganés, donde a las órdenes de Mauricio Pellegrino debutó en la jornada cuatro en la derrota de los «pepineros» frente al Villarreal.

Su debut como titular llegaría el pasado miércoles frente al Barça, y no pudo salir de mejor manera marcando el gol de una victoria histórica en la ciudad del sur de Madrid.

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Los primos talaveranos del Leganés

Rodríguez aguantó las tentaciones de fichar por el City de Guardiola, equipo que dejó embelesado después del 4-0 que se llevó en la UEFA Young League, con golazo incluido del de Los Navalmorales, así como del Celta de Vigo, que ya quiso hacerse con sus servicios el año pasado, todo ello con la idea de poder triunfar en el Madrid.

Camino opuesto al de su primo, Jose Arnáiz, quien se forjó en La Masía, aunque el destino los ha querido juntar en Butarque. Esperemos que estas dos perlas del fútbol castellano-manchego puedan seguir los pasos de los grandes centrocampistas que ha dado la región, como Manu Trigueros o el mismísimo Iniesta, y puedan convertirse en referencia de liga de las estrellas.