«Los Bomberos jugamos con el tiempo, pero no siempre el mejor rescate es el más rápido. El mejor rescate es el que se adecúa a las lesiones que sufre el ocupante, porque si tiene una posible lesión medular hay que tener un trato exquisito, hay que generar el espacio para que la manipulación del ocupante no le agrave la lesión».
Una vez que los Bomberos son activados por el servicio de Urgencias y Emergencias 112…
No siempre las prisas son buenas… Son palabras de Miguel Ángel Muelas, suboficial del Consorcio de Bomberos de Toledo y uno de los instructores del curso (de 25 horas) sobre técnicas de intervención en accidentes de tráfico que durante tres días de esta semana se ha impartido a una veintena de Bomberos de la comunidad autónoma en las instalaciones del servicio de Urgencias y Emergencias 112 en Toledo (que es quien activa a los Bomberos siempre que tienen que realizar una salida para atender un accidente o similar).
Curso del que fue testigo directo encastillalamancha.es.
[ze_gallery_info id=»273123″ ]Video realizado por Rebeca Arango y Sara M. Trevejo.
Una actividad formativa organizada por la Escuela de Protección Ciudadana de Castilla-La Mancha, organismo que depende de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, «en la que tratamos de mejorar las técnicas de rescate en los accidentes de tráfico. El objetivo principal es que el ocupante esté liberado del vehículo en el menor tiempo posible y con la mayor seguridad, siempre intentando evitar que se agraven las lesiones que haya podido sufrir durante la colisión».
Bomberos y personal sanitario, una sincronización perfecta
Por eso Muelas insiste en que lo importante es que para liberar a esa persona atrapada «hay que realizar una secuencia de trabajo lógica». O, lo que es lo mismo, «el personal sanitario nos informa de cómo está el paciente antes de actuar y vemos de qué tiempo disponemos para liberarlo».
Con vehículos adquiridos en desguaces, los Bomberos se dividían en tres grupos y perfeccionaban la técnica de «romper» literalmente los techos o arrancar las puertas para tener espacio libre con el que liberar al herido. O cómo protegerse a ellos mismos debido a la premura del tiempo y las condiciones de trabajo en las que tienen que desarrollar su labor tras un accidente.
Una vez que el servicio de Urgencias y Emergencias 112 coordina la actuación de quienes intervienen en un accidente de tráfico, Bomberos y miembros de los servicios sanitarios trabajan de forma conjunta y coordinada en el lugar de los hechos para que el paciente pueda ser rescatado primero y atendido después con las mayores garantías posibles antes de ser trasladado a un hospital.
Ahí es donde se comprueba la pericia de estos profesionales…