El Liberbank Cuenca se impuso este sábado con mucha facilidad (37-25) al Achilles Bocholt belga en partido de vuelta de la tercera ronda de la Copa EHF y cierra una eliminatoria inmaculada en su estreno oficial europeo, ya que en la ida había ganado 29-34, y ahora espera el sorteo para la fase de grupos.
Como ya quedó evidente en la ida, el balonmano español es muy superior al belga. El Achilles difícilmente tendría cabida en la liga Asobal, por lo que el sorteo fue benigno con los conquenses que han sabido aprovechar dicha circunstancia.
El partido tiene poco que comentar. La igualdad en el luminoso apenas duró siete minutos, 3-2, porque dos más tarde ya figuraba un 5-2 en el marcador. El internacional español júnior Kilian Ramírez jugó todo el partido y fue uno de los protagonistas al realizar 17 paradas, 11 desde los seis metros, y acabar con cualquier atisbo de reacción de los visitantes. Además, marcó un gol desde su portería aprovechando que el rival atacaba sin portero.
En esta primera parte, conforme avanzaba el partido, mayor era la diferencia en el luminoso llegándose al descanso con un claro 20-13 y el partido más que sentenciado.
En la segunda parte, los conquenses jugaron un poco más relajados, sin esfuerzos físicos especiales, la liga Asobal espera, y aún así aumentaron la diferencia a 12 goles, 37-25, la máxima en todo el partido. Varios de ellos aprovechando que no había portero rival. El Achilles Bocholt no bajó los brazos, pero su calidad no dio para más.
Como curiosidad, el brasileño Leo Dutra, máximo realizador del torneo, se quedó en tres goles a pesar de que su equipo logró 37. Y el juvenil Alejandro Taravilla tuvo sus minutos europeos y también marcó un gol.
Superado este primer escollo en su debut oficial europeo, el Liberbank Cuenca espera el sorteo de la fase de grupos para conocer a sus rivales. Evidentemente, la competición no será tan sencilla.