Hace un mes Castilla-La Mancha se colocaba a la vanguardia en España en la detección de patologías a través del cribado neonatal, conocido como prueba del talón. El 12 de noviembre de este año se pasaba de las 20 a las 24 enfermedades, siendo la comunidad autónoma en la que más se analizan, solo por detrás de Galicia, un dato que resulta más significativo si -tal y como ponía de manifiesto el director general de Salud Pública de la región, Manuel Tordera– se tiene en cuenta que en cuatro años -desde 2014- se ha pasado de 10 a 24.
Tordera también apuntaba que las pruebas practicadas a lo largo de 2017 permitieron identificar en Castilla-La Mancha 15 casos sospechosos, unos casos que son trasladados al servicio de Pediatría y a la Dirección Provincial de Sanidad para que se lo comuniquen a la familia y ésta acuda con el bebé para la obtención del diagnóstico definitivo. Explicaba que cada año la cifra de casos sospechosos suele ser similar.
En 2018 12.641 recién nacidos se han sometido al cribado neonatal, frente a los 15.579 y 15.453 de 2017 y 2016 respectivamente. Este año, además, se han llevado a cabo 15.721 muestras y 282.629 análisis.
El objetivo que se plantea el Gobierno regional es ir aumentando el número de enfermedades metabólicas detectadas mediante la prueba del talón. En ello tienen mucho que decir los grupos de trabajo tanto del Ministerio de Sanidad como de la Consejería de Sanidad, expertos que valoran las necesidades de cada momento y que orientan hacia las medidas a adoptar.
Un análisis de sangre en las primeras 48 y 72 horas de vida
La prueba del talón es un análisis de sangre que se realiza a los recién nacidos en las primeras 48 y 72 horas de vida. Sirve para identificar enfermedades que pueden generar alteraciones en el desarrollo físico y psíquico, con lo que esta detección precoz hace posible iniciar un tratamiento temprano que pueda mejorar el pronóstico de la enfermedad y la calidad de vida.
En esta tarea toman partido el hospital y el centro de Atención Primaria, el laboratorio de cribado neonatal y la unidad clínica de seguimiento. En este sentido, es el Instituto de Ciencias de la Salud de Talavera el laboratorio que recibe y analiza las muestras.
La Junta de Comunidades puso en marcha en 1989 el Programa de Detección Precoz de Enfermedades Congénitas y Metabólicas en recién nacidos. Por aquel entonces el número de metabolopatías a investigar eran dos.
Todos los centros sanitarios de titularidad pública o privada ubicados en Castilla-La Mancha en los que se atiendan partos están obligados a facilitar diariamente a la Consejería de Sanidad los datos de cada recién nacido en dichos centros, junto con los de la madre, así como los de domicilio, número de teléfono de contacto y centro de salud o consultorio local en el que se inscribe al bebé, entre otros detalles de carácter sanitario.
Todos estos datos son cargados diariamente en la aplicación informática de gestión del programa de detección precoz de enfermedades neonatales, el SILCAM, que entre otras funciones permite comprobar el estado de las analíticas llevadas a cabo ante consultas que puedan realizar profesionales sanitarios o la familia; saber si ya se ha remitido la carta con los resultados o está pendiente; además de poder localizar a los recién nacidos cuya muestra de sangre no ha sido recibida en el laboratorio del Instituto de Ciencias de la Salud tras 10 días de producirse el nacimiento.
En estos últimos supuestos, desde la Dirección Provincial de Sanidad se pone en marcha las acciones necesarias para la búsqueda activa y localización del recién nacido al que no se le haya tomado la muestra de sangre por cualquier circunstancia e, igualmente, se ocupan de notificar los recién nacidos a sus correspondientes zonas de Atención Primaria para llevar a cabo en ellas esa recogida de muestra cuando no se ha podido realizar en los servicios hospitalarios de maternidad por algún motivo.