La borrasca Emma llegó con mucha fuerza a España, también a Castilla-La Mancha, y causó verdaderos estragos. Fue el 1 de marzo y estos fueron algunos de los ejemplos que se vivieron en la comunidad autónoma:
En la ciudad de Toledo, un árbol de la Ronda de Buenavista se partió desde su base provocando daños en el vallado de la urbanización donde estaba. No hubo que lamentar daños personales, pero sí se produjeron en el vallado y en alguno de los vehículo que había aparcados en el interior de la urbanización. Caídas de árboles, de ramas, de tejas y de macetas desde los balcones se produjeron en la capital regional. Todo quedó en un susto.
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La que lio Emma en los molinos de Consuegra…
En Consuegra (Toledo) también sintieron su llegada, ya que el viento arrancó, literalmente, la techumbre de uno de los históricos molinos del Cerro Calderico y causó daños en aspas de muchos otros.
Por fortuna, el Gastromolino que Emma había casi destrozado «regresó». Un histórico molino de viento que perdió toda su techumbre y que dos meses después del incidente, el restaurante que se halla en dicho molino publicó un vídeo grabado con un dron para mostrar el seguimiento hecho a toda la reconstrucción del techo dañado por el temporal hasta la fiesta de bienvenida que organizaron. Un vídeo realizado por Dron Quijote. Espectacular.
No fue de extrañar esta rápida restauración, puesto que al día siguiente del suceso todo el pueblo ya se había volcado para recuperar el emblema de la localidad, los «gigantes de largos brazos», que diría Don Quijote.
Molinos que lograron poner de acuerdo a todos los partidos políticos representados en las Cortes de Castilla-La Mancha. PP, PSOE y Podemos aprobaron por unanimidad la reconstrucción de los molinos y dispusieron una partida de 231.300 euros, que habilitaría el Gobierno de CLM en colaboración con el Ayuntamiento y el Ejecutivo central.
Suceso que se unió a las 15 incidencias que dejó en Toledo, las nueve de Talavera, o los bidones de vino que echó abajo en tornado en Villarrubia de los Ojos.
Hasta 100 litros por metro cuadrado que dejó Emma en algunas zonas de la región
Y es que según los datos que recogió la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Emma dejó, por ejemplo, nada más y nada menos que 98,2 litros por metro cuadrado en Castillo de Bayuela, en la provincia de Toledo, el punto de la región donde más agua se recogió. En Oropesa, también en la provincia de Toledo, las precipitaciones sumaron 88 litros por metro cuadrado. O en San Pablo de los Montes (Toledo) con 74 litros por metro cuadrado.
En la provincia de Ciudad Real, el lugar donde más precipitaciones se acumularon fue Fuencaliente, 71,8 litros por metro cuadrado. En Pantano el Vado (Guadalajara), 62,4 litros por metros cuadrado; en Beteta (Cuenca) 60,6 litros por metro cuadrado; en Puebla de Don Rodrigo (Ciudad Real), 56,9 litros por metro cuadrado; y en Talavera (Toledo) se superaron los 55 litros por metro cuadrado.
En las capitales de provincia, Ciudad Real es la que mayores precipitaciones recibió, superando los 42 litros por metro cuadrado. En Cuenca la precipitaciones llegaron a los 41 litros por metros cuadrado, mientras que Guadalajara se quedó en 34,6 y Albacete en 17,8 litros por metro cuadrado.
Emma fue la única capaz de desplazar el anticiclón de las Azores y no dejó ningún rincón de Castilla-La Mancha sin precipitaciones.