A veces, cuando hablamos de la educación en valores, nos olvidamos que la educación, en sí misma, es un valor, un valor universal que habla de la auténtica libertad de los pueblos y que se encuentra debidamente reconocido, no solo en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, sino también y como no podía ser de otra manera, en nuestra Constitución Española.
Yo lo tengo claro, si los castellano-manchegos me otorgan su confianza el próximo mes de mayo, la libertad de educación y la educación en libertad serán un pilar básico y esencial de mi acción de gobierno y, tanto los profesores, como los colegios, institutos, universidades y resto de centros educativos y/o formativos de nuestra región, tendrán la atención y los recursos que merecen y necesitan porque esos recursos son, sin lugar a dudas, una inversión real en aquellos que construirán el futuro de Castilla-La Mancha en los próximos años y décadas.
Pero es más, tengo muy claro que la educación en nuestra región ha de ser una educación inclusiva, de vanguardia, donde los padres tengan plena libertad para elegir lo que quieren para sus hijos, donde los profesores tengan el reconocimiento, la confianza y el respaldo del ejecutivo para desarrollar, también en libertad, su labor docente y donde los alumnos tengan la garantía de recibir una educación de excelencia que abunde en la digitalización de las aulas, reduzca el fracaso escolar, apueste por la formación dual y les garantice un futuro real de oportunidades en nuestra tierra, pero también una educación que les forme en los valores que consagra nuestra Constitución tales como el estado de derecho, la igual real y la unidad de España.
Dijo Gabriel Celaya en uno de sus poemas más conocidos que “Educar es como poner el motor a una barca…” yo, con el permiso del poeta y en este día internacional de la educación, me gustaría personalizarlo en nuestra patria y en nuestra tierra y decir que “Educar, es poner el motor a un futuro de libertad en Castilla-La Mancha y en España” y a ello voy a dedicar todo mi esfuerzo y compromiso.