El jurado popular ha emitido el veredicto de no culpable para Fuyong Chen, un ciudadano chino detenido en Illescas y acusado de asesinar a un compatriota que regentaba un bazar en Lerma (Burgos) en marzo de 2010, por lo que el juez ha decretado su puesta en libertad inmediata.
El acusado se encontraba en prisión desde mayo de 2010 y ahora se tendrá que someter a otro procedimiento legal, ya que cuando fue detenido se encontraba sin permiso de residencia, trabajando y viviendo en una nave de almacenaje en la localidad toledana.
La fiscalía había pedido para el acusado una condena de 22 años y medio de cárcel por asesinato con alevosía y robo con violencia, además de más de 200.000 euros de indemnización para los hijos de la víctima.
El jurado se ha mostrado conforme con el relato de los hechos que culminaron con la muerte de Haiseng Cheng, que según la fiscal fue agredido amordazado, golpeado y asesinado por dos hombres y una mujer, todos de aspecto oriental, que tenían intención de robar.
Sin embargo, los miembros del jurado han concluido que nada ha probado que el acusado estuviera en la localidad burgalesa de Lerma el día en que se produjeron estos hechos ni que fuese uno de los tres agresores, uno de los cuales está en paradero desconocido, mientras que otra no ha sido identificada.
El jurado ha señalado también que ningún testigo ha reconocido al acusado, las muestras de ADN tomadas en el lugar del asesinato no coinciden con las suyas y ningún repetidor de telefonía le sitúa en la zona de Lerma el día del crimen.
Para el jurado, el hecho de que el acusado utilizase el móvil de la víctima un mes y medio después de su asesinato no confirma que fuera uno de los autores, porque él mismo declaró en la vista que se lo había comprado a otro compatriota.