El juzgado de primera instancia e instrucción de Torrijos investiga un presunto delito de maltrato o abandono de animales en un criadero canino de Méntrida (Toledo) y en el que está personada la protectora ‘El Refugio». La investigación judicial se ha iniciado tras la denuncia presentada por ‘El Refugio’ ante el Seprona de la Guardia Civil por la «multitud de irregularidades» detectadas en las instalaciones y por el presunto maltrato que se daba a los animales.
Según esta protectora, que visitó las instalaciones, en este criadero, denominado ‘El Chincol’, había «multitud de cadáveres de perros apilados y enterrados en la finca, perros sin identificar, sin atención veterinaria, sin alimentación adecuada y en condiciones higiénicas inaceptables».
Según las declaraciones de un trabajador del criadero, que constan en el informe del Seprona, afirma ‘El Refugio’, la responsable del criadero, supuestamente, «dejaba morir de agonía» a aquellos perros que presentaban alguna complicación de salud y que ya no le servían para las tareas de reproducción, sin prestarles, supuestamente, ningún tipo de atención veterinaria ni alimentación hasta su muerte.
Tras la denuncia de la protectora, el Seprona ha inspeccionado el criadero «El Chincol», encontrando a los animales, supuestamente, malviviendo entre orines y kilos de excrementos, sin agua ni comida y en condiciones veterinarias de total abandono