El presidente de la Diputación de Toledo, Arturo García-Tizón, ha valorado los buenos resultados que ha alcanzado el Programa de Escuelas Taller y Talleres de Empleo que gestiona la institución provincial.
García-Tizón se ha pronunciado así durante el acto de clausura de la Escuela Taller Garcilaso de la Vega VII, que ha tenido lugar en el Convento de San Pablo de las Madres Jerónimas y ha coincidido con la entrega a la congregación de la obra de rehabilitación de la planta baja del Convento, destinada antes a chocolatería, que han realizado alumnos de esa escuela taller, explica un comunicado.
El Programa, según García-Tizón, «no sólo cumple su principal objetivo de conseguir la cualificación laboral de los alumnos y prepararlos para su inserción laboral en el futuro, sino que además revierte directamente a la sociedad realizando obras de alta calidad necesarias para los municipios de la provincia».
Ha felicitado a los responsables y alumnos de la escuela por el trabajo y se ha mostrado convencido de que hay que seguir apostando por estas iniciativas porque, a su juicio, las administraciones públicas tienen que «crear las condiciones para que la actividad privada permita un empleo en cantidad y de calidad».
«Nuestras Escuelas y Talleres van dirigidas fundamentalmente a la formación y a la obtención de unos conocimientos que permitan luego conseguir un empleo, promoviendo también el autoempleo y la creación de nuevas empresas», ha añadido.
García-Tizón ha aclarado que «para la mayoría de alumnos ha sido su primer trabajo y un medio de iniciar o complementar su cualificación profesional o laboral».
REMODELACIÓN DEL CONVENTO DE SAN PABLO
Se ha mostrado, además, muy satisfecho de poder entregar la obra de remodelación del Convento de San Pablo, que otra de las obras que se llevan a cabo en toda la provincia para recuperan el patrimonio histórico y cultural, en este caso de Toledo, «una ciudad monumental y que es muy difícil de entender si no se comprende al mismo tiempo la espiritualidad que se conservaba dentro de estas edificios».
En total han sido 24 los alumnos que han recibido hoy el diploma acreditativo tras recibir formación durante un año en cerrajería, polimantenimiento de edificios y vidrieras, además de concederse cuatro premios, al más destacado en cada especialidad y al mejor de la Escuela Taller, que ha recaído en Gani Shina.
Aparte la rehabilitación del Convento de San Pablo, los alumnos han trabajado, también, en mejoras en la Residencia Social Asistida ‘San José’; vidrieras en la sede de la escuela taller de Toledo y de otros municipios, y puertas de forja para el Atrio del Convento de Agustinas Recoletas en La Calzada de Oropesa, entre otras.
Asimismo, han recibido formación complementaria para conseguir el Graduado en ESO, en sensibilización ambiental, prevención de riesgos laborales, sensibilización en igualdad de oportunidades, alfabetización informática y orientación profesional en cuanto a inserción laboral y técnicas de búsqueda de empleo y autoempleo.
La Escuela Taller Garcilaso de la Vega VII ha contado con una inversión total de 369.871,80 euros de los que casi 300.000 han sido aportados por la Junta Autonómica.