La Policía Nacional ha identificado y detenido a los grafiteros más activos de la zona centro de España, a los que se les atribuyen daños valorados en más de 750.000 euros y que actuaban en la estación de Cercanías de Renfe de Guadalajara.
En el marco de la operación «Laca 2» y según informa la Comisaría Provincial en una nota de prensa, los agentes han detenido a un total de 21 personas que realizaban grafitis en los vagones de trenes de Cercanías, hechos que comenzaron a detectarse en el verano de 2018 y que cobraron especial relevancia durante los meses de julio y agosto en la estación de cercanías de Renfe de Guadalajara.
Los integrantes de esta banda actuaban como verdaderos grupos organizados tipo comando, cubriéndose el rostro para dificultar su identificación y no dudando en ningún momento en hacer frente a los vigilantes de seguridad o a las fuerzas y cuerpos de seguridad con la máxima violencia si era necesario.
A estos jóvenes, todos ellos de nacionalidad española y con edades comprendidas entre los 17 y 35 años, se les imputan varios delitos de daños, desórdenes públicos y organización criminal. Es reseñable que 13 de los detenidos ya contaban con antecedentes policiales por hechos similares a los ahora investigados.
Esta operación es continuación de la realizada el pasado mes de noviembre, en la que se procedió a la detención de nueve personas como presuntos autores de los grafitis que dañaron varios trenes, también en la estación de Guadalajara.
Provocaban la detención forzosa y repentina de los vagones
Los cuantiosos daños ocasionados por los integrantes de este grupo han sido denunciados por Renfe y suponen un gran coste económico que, unido a los desórdenes públicos causados por la detención forzosa y repentina de los vagones, causan una gran alarma social.
En el operativo han sido intervenidos diversos botes de pintura en spray, bates de béisbol, teléfonos móviles que contenían vídeos grabados por estos grupos y otros útiles necesarios para llevar a cabo las pintadas.
Los detenidos empleaban diversos modus operandi para cometer los delitos. Aprovechaban el momento en que los trenes se encontraban estacionados para acceder a las instalaciones de Renfe y realizar las pintadas. Cuando los trenes se encontraban circulando, aprovechaban las paradas en las estaciones de paso o incluso llegaban utilizar el método del «palancazo», accionando el freno de emergencia del convoy y produciendo una frenada brusca y violenta del tren fuera de las paradas establecidas. Además, organizaban quedadas a través redes sociales para realizar pintadas grupales. Mientras realizaban los grafitis, procedían a grabarlos, para luego difundir las imágenes en las redes sociales buscando así reconocimiento, convertirse en referencia a imitar por otros grafiteros e incitar a otros a seguir pintando tanto en trenes como en cualquier espacio público.
Las investigaciones han demostrado que constituían un auténtico crew que -mediante quedadas organizadas- han participado en multitud de actos vandálicos por toda España, llegando incluso a viajar al extranjero para realizar grafitis de carácter vandálico, además de participar en las pintadas masivas que se realizaron el fin de semana de Halloween de 2018 en el Metro de Madrid.