El incendio de una nave industrial en el Polígono de Manzanares (Ciudad Real) en la que dos personas perdieron la vida y 16 resultaron heridas el pasado mes de septiembre, dio inicio a una investigación que ha conducido a la Guardia Civil a desmantelar una organización delictiva dedicada a la falsificación y contrabando de tabaco con 27 detenidos y casi 10 millones de euros en material intervenido.
Una operación bautizada como «Pastela», que ha sido presentada este jueves por el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Tierraseca, y el coronel jefe interino de la Comandancia de Ciudad Real, Humberto Urruchi, además del jefe de la segunda zona de la Guardia Civil de Castilla-La Mancha, Manuel Llamas.
El delegado ha calificado la operación de «especial magnitud» por el hecho delictivo en sí, la falsificación de tabaco y sobre todo porque estaba en manos de una banda criminal «muy especializada».
Ha destacado el número de detenidos, 27, con edades comprendidas entre los 29 y 62 años, procedentes de Europa del Este y a los que se les imputan delitos de homicidio imprudente, contra la hacienda pública, contrabando, organización criminal, sobre la venta y distribución de labores de tabaco a nivel internacional y ocultación de sus beneficios mediante fraudes fiscales.
Casi 10 millones de euros en material incautado
Además ha dado especial trascendencia al valor económico del material incautado con casi 10 millones de euros, a lo que hay que unir que en los cuatro meses durante los que se desarrollaron las actividades delictivas la capacidad de producción ascendió a 200 millones de euros y una capacidad diaria de producción de 1.200.000 euros.
Concretamente fueron intervenidas 1.154.400 cajetillas de tabaco, 750 kilos de tabaco picado, 2.000 kilos de cigarrillos liados y dos pallet de cigarrillos defectuosos.
Sobre el inicio de la investigación ha explicado que tras el incendio de la nave de Manzanares, la inspección ocular posterior puso al descubierto una gran cantidad de tabaco picado y maquinaria industrial, además de una zona creada a modo de vivienda para los operarios que trabajaban en la nave incendiada.
Investigaciones posteriores corroboraron que la actividad de la nave era la fabricación, elaboración y distribución de cigarros y a partir de tabaco picado de manera ilegal, ya que se desconocía la procedencia de la picadura con la que se elaboraban.
La producción era exportada a países como Inglaterra, Italia y Rusia
Por otro lado, el resultado de esta operación, en palabras de Tierraseca, ha permitido desarticular una banda criminal internacional ya que la producción era exportada a países como Inglaterra, Italia y Rusia, para lo cual han contado con la colaboración de Europol.
Esta coordinación de la Guardia Civil con Europol determinó que la organización conseguía grandes cantidades de picadura de tabaco que trasladaba hasta las naves. Allí se realizaban las fases de producción, elaboración y distribución del tabaco, para su posterior traslado a otros países europeos.
Captaban a los operarios en países del Este de Europa para trabajar por periodos de un mes aproximadamente. Así no levantaban sospechas ya que ninguna de estas personas tenía visado para trabajar y habían entrado a España como turistas.
Estos trabajadores vivían en el interior de la nave durante toda la estancia y eran reemplazados continuamente para no generar lazos amistosos entre ellos ni con la población local.
Los investigadores interceptaron un camión cuando salía de una de las naves perteneciente a la organización y, tras inspeccionar su carga, hallaron numerosos pallets de tabaco falsificado, ya preparado para su distribución y venta, ocultos tras otros dos pallets sin carga.
Fue detenido el conductor del camión y la persona que conducía un vehículo «lanzadera», que se situaba delante del camión como medida de seguridad para evitar ser interceptados.
Se registraron tres naves industriales en Santaella (Córdoba), contiguas unas de otras, y se detuvo a otras 23 personas que se encontraban en ese momento trabajando en la elaboración ilegal de tabaco, así coma a otras dos personas, vecinas de esta localidad cordobesa y propietarias de la nave.
La investigación ha sido desarrollada por la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Comandancia de Ciudad Real y la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, en coordinación con Europol. Los detenidos, junto con las diligencias, han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Manzanares.