La Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales ha aprobado una subvención de 62.000 euros para contribuir a la atención de la población palestina refugiada en Siria y que sufre las consecuencias de la guerra civil en este país.
Según ha informado en un comunicado el Gobierno regional, se trata de un plan de respuesta inmediata a la emergencia en este país, coordinado por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA).
El proyecto se centra en facilitar artículos no alimentarios de emergencia como mantas, colchones, hornillos o bidones de combustible a las personas de hogares palestinos que estaban refugiados en Siria y que sufren las consecuencias de la guerra civil.
Gracias a este programa, que se desarrolla desde el mes de septiembre, se han visto beneficiadas unas 3.840 personas, la mitad de ellas mujeres, con kits básicos de abrigo y cocina para la supervivencia diaria.
«Es una contribución modesta, pero solidaria, con quienes sufren los efectos de una guerra y Castilla-La Mancha no quiere olvidarse de los más perjudicados por este conflicto», ha asegurado el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales, José Ignacio Echániz.
En el trabajo de campo de Naciones Unidas se ha priorizado la atención a los hogares que tenían como cabeza de familia a una mujer, ya que se consideran los más vulnerables.
De hecho, el 70 por ciento de las familias a las que se ha facilitado ayuda estaban encabezadas por mujeres.
Los desplazamientos provocados por el conflicto han provocado, en muchos casos, la carencia de los bienes esenciales para la supervivencia.
La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio fue establecida mediante resolución de la Asamblea General de la ONU en diciembre de 1949, tras la primera guerra árabe-israelí. Esta institución cuenta con una delegación en Castilla-La Mancha desde el año 2009.