El Sindicato de Enfermería de Castilla-La Mancha Satse ha reiterado hoy su total rechazo al cierre de los Puntos de Atención Continuada (PAC), que será efectivo a partir de mañana, lunes, porque considera que esta medida supondrá el aumento de la probabilidad de morbimortalidad de la población afectada.
Para Satse, se trata de una medida «inaceptable» porque obedece únicamente a criterios económicos y porque el Servicio Regional de Salud (Sescam) ha decidido el cierre de estos 21 centros de urgencias «en contra de la opinión de todos los afectados».
Además, el cierre de estos Puntos de Atención Continuada supondrá una mayor demanda de los servicios de urgencias de otros centros y también el aumento de la utilización de recursos más costosos establecidos para situaciones de emergencia.
A juicio del sindicato de enfermería, la justificación de los servicios sanitarios debe basarse en el resultado de calidad, prevención y promoción de la salud y no en criterios cuantitativos ni productivos.
Y por ello, agrega en un comunicado, «es importante destacar que estos puntos de atención continuada garantizan la atención al paciente en cualquier momento y son los responsables de la prestación de los primeros cuidados en cualquier proceso de enfermedad, garantizan la supervivencia y posibilitan el acceso a servicios especializados de los pacientes».
Además, con esta actuación, según Satse, el Gobierno regional «privará a los usuarios de servicios básicos sanitarios y castigará a poblaciones y núcleos rurales, ya de por si desfavorecidos».