La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha condenado a 17 años y medio de prisión a un conocido psicólogo infantil de Ciudad Real, colaborador habitual de los medios de comunicación y especializado en acoso escolar, por abusar sexualmente en 2016 de dos de sus pacientes, dos niñas de 11 y 12 años de edad.
En la sentencia que firma la presidenta de la Audiencia Provincial, María Jesús Alarcón, se considera probado que el psicólogo P.J.M.C., de 64 años en la actualidad, trató a la mayor de sus víctimas entre mayo y julio de 2016 por un trastorno de déficit de atención.
Las sesiones se desarrollaban siempre de la misma manera, ya que se iniciaban con una entrevista conjunta de la madre y la hija, tras lo que se quedaba a solas con la menor en la consulta y, salvo en la primera sesión, es en ese momento cuando usaba con la niña una terapia hipnótica -de la que no informó a la madre- y la tumbaba en la camilla para besarla y tocarla en sus pechos y genitales.
Por estos hechos, la magistrada lo considera responsable de un delito continuado de abuso sexual con introducción de miembros corporales y abuso de autoridad, por lo que le impone 12 años de cárcel y una indemnización de 50.000 euros para la niña que tiene pesadillas, problemas conductuales y emocionales, bajo rendimiento académico y estrés postraumático. Además, no se podrá acercar a la víctima ni comunicarse con ella en 18 años.
Segunda víctima
Ese mismo año de 2016, y aprovechando que trataba a su hermano, el psicólogo infantil insistió entre octubre y noviembre en tratar a su hermana que entonces tenía 13 años, siguiendo exactamente el mismo esquema de comportamiento que con la otra menor.
Así, llegó a quedarse solo con la menor en la consulta al menos tres veces y en dos de ellas usó la técnica hipnótica, la tumbó en la camilla «y con intención de satisfacer sus deseos sexuales» la besó en la boca y le tocó los pechos y los genitales tanto por encima como por debajo de la ropa.
En este caso, la magistrada le impone una pena de cinco años y medio de cárcel por un delito continuado de abuso sexual a menor de 16 años con abuso de superioridad y también deberá indemnizar con 50.000 euros a la víctima que en la actualidad sufre desajustes psicológicos de significación clínica, así como problemas adaptativos en diferentes niveles.
La magistrada María Jesús Alarcón explica en la sentencia que durante el juicio, que se celebró a principios de mayo a puerta cerrada, el testimonio prestado por las menores «fue demoledor sin duda ninguna» y reconoce que ambos -además de estar avalados por los informes de los forenses- reúnen los requisitos de credibilidad, verosimilitud y persistencia incriminatoria necesarios.
Además, reconocieron que el hombre les hizo algún regalo -como un teclado o una excursión a un centro de recuperación de aves- para tratar de garantizarse el silencio de las menores a las que decía que se trataba de un secreto que no debían contar a sus padres aunque las niñas acabaron haciéndolo.
Otra sentencia pendiente para el condenado
Se da la circunstancia de que esta misma semana P.J.M.C. ha vuelto a sentarse en el banquillo de los acusados por un nuevo delito de presunto abuso a una menor en 2016 que, después de conocer el caso de las dos menores por cuyo caso se acaba de dictar esta sentencia, confesó a sus padres lo que le había ocurrido y presentaron una denuncia más.
Durante el juicio, por el que la Fiscalía solicita cinco años más de cárcel y 12.000 euros para la víctima, la niña volvió a narrar el mismo modus operandi del hombre cuando se quedaba con ella a solas en la consulta.