El Gobierno de Castilla-La Mancha y el PP han vuelto a pedir al secretario regional del PSOE, Emiliano García-Page, que cese al responsable del PSOE en Ciudad Real, José Manuel Caballero, tras la sentencia del caso del espionaje denunciado por el PP.
El portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Leandro Esteban, y la portavoz regional del PP, Carmen Riolobos, han reclamado ese cese como consecuencia de la sentencia que la pasada semana absolvió a María Dolores de Cospedal, a Rosa Romero y a Francisco Cañizares de la demanda interpuesta contra ellos por la empresa Detectives Almirante.
A preguntas de los periodistas en la presentación del Plan de Emergencia Territorial de Ciudad Real, Leandro Esteban ha dicho que ya han transcurrido varios días sin que «haya habido ningún movimiento político, ni cese ni dimisión» por parte de José Manuel Caballero.
Ha recordado que el secretario del PSOE de Ciudad Real se encargó en su día de solicitar a «todo el mundo la dimisión» por este caso y, sin embargo, se ha demostrado que Cospedal «decía la verdad» al denunciar que espiaban al PP.
Ahora, según el portavoz de la Junta, los tribunales han dado la razón a aquellos cargos políticos que denunciaron fueron vigilados y observados por la agencia de detectives y que además, ha dicho, tuvieron que «padecer las críticas de aquellos que de una manera u otra andaban detrás de este asunto», en referencia a dirigentes socialistas.
Por último, ha mostrado su satisfacción de que la sentencia haya probado que Rosa Romero, María Dolores Cospedal y Francisco Cañizares dijeron la verdad y que fueron investigados «con una clara intencionalidad política».
Por su parte, Carmen Riolobos también ha reclamado a García-Page el «cese inmediato» de Caballero, al que se ha referido como «un experto en emponzoñar y envenenar la vida política».
También ha acusado a García-Page de ser otro «experto en escaquearse cuando hay que tomar responsabilidades», como en el caso de esta sentencia.
Riolobos ha recalcado que la sentencia del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Coslada es «ejemplar» y demuestra que «Cospedal, Romero y Cañizares tenían razón, que hubo seguimiento a cargos del PP, que éste se hizo en plena campaña electoral, que tenía fines políticos y que no puede utilizarse la justicia en vano con fines estrictamente políticos».
También ha considerado que esta «forma sucia de hacer política» es «un marchamo del señor Caballero, mano derecha -ha recordado- del anterior presidente socialista José María Barreda«.
Y ha insistido en que García-Page «no debe esconderse ante un asunto tremendamente grave que deja claro el modus operandi del PSOE como muñidor de una guerra sucia y estrategia para ganar las elecciones en Ciudad Real».
Por último, Riolobos ha vuelto a instar a García-Page a cesar «de forma inmediata» a Caballero y a «limpiar» su partido «si quiere que los dirigentes del PSOE tengan algún tipo de credibilidad».