Castilla-La Mancha fue la quinta comunidad autónoma donde más cayó la licitación de obras por parte de la comunidad en 2012 respecto al año anterior, con el 74,4 por 100 de descenso, y un importe de obra licitada de 21,8 millones de euros.
Según los datos publicados por la patronal de las grandes empresas, Seopan, las obras licitadas en el conjunto de las administraciones públicas en el país disminuyeron un 45,8 por 100 en 2012, hasta totalizar un importe de 7.403,4 millones de euros, la cifra más baja desde al menos 1996.
El importe sacado a licitación el pasado año es el menor de la serie histórica de la patronal, que comenzó en 1996, y contrasta con los 46.701,3 millones de euros sacados a concurso en obras en 2006.
El mayor descenso fue el experimentado por el Gobierno, que sacó obras a concurso por valor de 2.649,2 millones de euros (59 por 100 menos), mientras que las comunidades autónomas sacaron a licitación 2.196,7 millones (38,4 por 100 menos) y los ayuntamientos, 2.557,5 millones (29,3 por 100 menos).
Dentro de la Administración General del Estado, el principal organismo licitador fue el departamento que dirige Ana Pastor, con obras por valor de 1.972,5 millones (61 por 100 menos), en tanto que el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente contabilizó 468,9 millones (36,3 por 100 menos).
Dentro de Fomento, destaca el papel del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), que sacó a licitación 1.303 millones (57 por 100 menos), en tanto que Autoridades Portuarias presentó concursos por 326,2 millones (0,9 por 100 más) y la Dirección General de Carreteras, 167 millones (82 por 100 menos).
La Dirección de Infraestructuras Ferroviarias sacó a concurso 86,6 millones (14,2 por 100 más), en tanto que Aena presentó a licitación obras por 56,5 millones (81,7 por 100 menos), y Ferrocarriles de Vía Estrecha (FEVE), 4,5 millones (91,4 por 100 menos).
De la licitación total de las administraciones públicas, la mayor parte fue destinado a la construcción de infraestructuras de transporte como ferrocarriles (1.760,4 millones, el 52 por 100 menos) y carreteras (1.007,9 millones, el 50,9 por 100 menos), en tanto que a puertos dedicaron 281,3 millones, el 4,4 por 100 más.
Los concursos de urbanización disminuyeron un 42,4 por 100, los de obras hidráulicas un 27,6 por 100 o los de infraestructuras medioambientales, un 46,3 por 100.
Dentro de los concursos de obras de edificación, destaca el descenso de las dedicados a actividades sanitarias (64,4 por 100), deportivas (42,3 por 100) y docentes (26,4 por 100).
En cuanto a la licitación autonómica, todas las regiones redujeron sus obras sacadas a concurso, salvo La Rioja, que las aumentó el 69,2 por 100; Cataluña, que las subió el 31,4 por 100; y Extremadura, que las incrementó el 4,8 por 100.
Las caídas más pronunciadas se registraron en Baleares (96,5 por 100), Asturias (95,2 por 100), Cantabria (79,8 por 100), Navarra (76,8 por 100) y Castilla-La Mancha (74,4 por 100).