El Gobierno regional ha afirmado que el retraso en la respuesta técnica al incendio declarado en la población toledana de Almorox y que posteriormente se propagó a la madrileña de Cadalso de los Vidrios, declarado el pasado 28 de junio, no se debió «en ningún caso» a la acción del servicio de extinción de Castilla-La Mancha.
El Gobierno castellano-manchego ha replicado así en nota de prensa al secretario general de UGT, Pepe Álvarez, quien anunció el martes que el sindicato se presentará como acusación particular en la investigación abierta por la Fiscalía de Fuenlabrada por la gestión del incendio y quien añadió que «si el foco -en lugar de estar en Castilla-La Mancha- hubiera estado en Madrid, se hubiera intervenido antes y no el desastre que hizo el incendio».
Desde la Consejería de Desarrollo Sostenible han manifestado que a los cinco minutos de la detección del incendio por el puesto de vigilancia fija de Castilla-La Mancha se encontraba trabajando ya un medio de la comunidad autónoma y un director de extinción en el terreno y se asignaron otros dos.
Del mismo modo, ha aclarado que la Comunidad de Madrid actúa en el límite de Castilla-La Mancha recurrentemente en terrenos próximos a los límites administrativos, «en alguna ocasión previa solicitud de colaboración por esta comunidad autónoma y en muchas otras ocasiones ‘motu proprio’ y afirmando que no se ha solicitado autorización para actuar ni por tanto se ha autorizado ninguna intervención «ni en este incendio ni en ningún otro».
Asimismo, desde la Junta han asegurado que la colaboración entre las comunidades autónomas es una acción «normal y recurrente, en ocasiones solicitada y la mayoría de las veces ofrecida». «El Centro de Coordinación Operativa Regional de Incendios (COR) tiene constancia de que, en lo que va de año, al menos en nueve ocasiones medios de la Comunidad de Madrid han accedido al territorio de Castilla-La Mancha sin autorización alguna, lo que prueba la coordinación y el buen funcionamiento entre ambos gobiernos regionales», ha apostillado.
«Los incendios no conocen de límites administrativos, en ocasiones se producen en una comunidad y entran en otra. En Almorox, una zona de alto riesgo de incendios, ha pasado con asiduidad, como el incendio ocurrido en julio del 2013 originado en el vecino municipio de Cenicientos por una imprudencia de un operario de fomento de la Comunidad de Madrid y que calcinó 1.400 hectáreas prácticamente en su totalidad de esta comunidad autónoma», ha continuado.
Asimismo, en el Gobierno autonómico se han mostrado conscientes «de las críticas que está recibiendo la Comunidad de Madrid por su intervención, las situaciones de riesgo que sufrieron algunos de los combatientes y las reactivaciones que se pudieron producir mientras dirigía la extinción», pero ha insistido en que «no tiene nada que ver con la intervención de esta Comunidad Autónoma en la extinción que, hasta la fecha, no ha recibido ninguna crítica».
Finalmente, el Ejecutivo castellano-manchego ha explicado que no existe ningún convenio vigente entre estas comunidades autónomas en esta materia «debido a que la Comunidad de Madrid no aprobó ni firmó dicho acuerdo».