El secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, se ha mostrado muy preocupado ante las explicaciones de la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, sobre el supuesto pago de sobresueldos a dirigentes del PP, pues a su entender «no aclaran, sino enmarañan».
En declaraciones a los periodistas durante su visita a la Feria Internacional del Turismo (Fitur), que se celebra en Madrid hasta el domingo, García-Page ha manifestado su preocupación, un estado de ánimo que a su juicio también ha debido cundir entre los ciudadanos, quienes deben tener «muy mala imagen» de la política.
Y ello es debido porque las informaciones que relacionan a los dirigentes del PP con el cobro de supuestos sobresueldos en B «es probablemente la denuncia más grave que se ha conocido en democracia, porque afecta a mucha gente durante mucho tiempo», ha advertido.
Ha pedido tiempo para que esta «grave acusación» contra el PP «realmente se aclare», pues ha advertido de que, de no ser así, el país está «ante uno de los precipicios más abismales que se contemplan en la democracia».
Con todo, se ha mostrado partidario de «conceder el beneficio del a duda, a cualquier acusado, a cualquier denunciado» e incluso ha manifestado su deseo de que las informaciones publicadas en prensa sobre la contabilidad del PP «no se correspondieran con la verdad, que fueran un error».
A su entender, Cospedal «tiene un problema añadido» al margen de que esté «directa o indirectamente implicada y haya o no cobrado» y que consiste en que, al ser la secretaria general del PP, «es muy difícil que la gente entienda que todo es mentira» y que el extesorero del PP haya tenido coche oficial y un despacho con secretaria en la sede nacional del PP «hasta hace tres días».
«Para una persona normal de la calle, probablemente esto es lo que más llama la atención y está todavía por explicar», ha opinado.
Además, ha añadido que, como castellanomanchego, le duele que se vincule cada día más la imagen de la presidenta de la región con «una sarta de escándalos permanentemente y un sinfín de cosas que no tiene nada que ver con lo que preocupa a la gente de verdad» y que, a su entender, es el empleo y la salida de la crisis.