«En Castilla-La Mancha hay 271.610 personas que quieren trabajar y no pueden hacerlo, por eso tenemos 271.610 razones para seguir buscando la generación de empleo. Lo que nos reafirma en nuestro trabajo diario».
Carmen Casero, consejera de Empleo y Economía, comenzaba de esta forma su intervención durante el Debate general de la evolución del empleo en Castilla-La Mancha.
La consejera afirmó que el Gobierno de María Dolores de Cospedal «es consciente de la situación que tenemos, pero sabiendo que ustedes (se dirigía al PSOE) dejaron el marcado laboral en una tendencia negativa y que su política de empleo era la política de la deuda».
Casero sabía que nada más terminar ella intervendía la portavoz socialista de Empleo, Milagros Tolón. Por lo que le «avisó» ante su discurso posterior: «Durante la legislatura en la que usted fue concejala de Empleo en el Ayuntamiento de Toledo el paro aumentó de 3.200 a 6.300 personas. Desde luego, sus medidas no funcionaron, pero parece que sí saben que las nuestras lo van a hacer. Nosotros no estamos orgullosos de los datos del desempleo, pero tampoco lo estaríamos si los datos fueran la mitad de los que son».
Como dato positivo, Casero dijo que «los empresarios están empezando a recuperar la confianza en el Gobierno, pero ustedes no tienen ningún interés en ayudar a este gobierno ni a los ciudadanos de Castilla-La Mancha, sino que su único interés es alentar el frenazo de la economía».
Y puso varios ejemplos de esos empresarios «que están empezando a recuperar la confianza», como son «Jazztel, Senoble, Bash, Toyota o Inditex. Pero de esto no les oído decir nada. Lo que tenemos claro es que estamos en la senda de la recuperación».