«Blindar» los derechos medioambientales en la Constitución y en el Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha. Esa es la propuesta que realizado hoy el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. «Si mañana se abre el melón sobre la Constitución Española habrá que blindar, además de los grandes derechos sociales, el de una sociedad sostenible», ha defendido.
Así se ha pronunciado esta mañana en la inauguración de la planta fotovoltaica ‘Alten El Casar’, en este municipio guadalajareño. Precisamente, en este contexto, ha explicado que en Castilla-La Mancha es «autosuficientes en la producción de energías limpias». A este respecto ha indicado que las instalaciones de energía eólica con las que cuenta Castilla-La Mancha, sumadas a las de energía fotovoltaica, posibilitan la generación de energía a 2,7 millones de hogares, «lo que nos hace ser un ejemplo a seguir», ha rubricado.
Para el jefe del Ejecutivo autonómico hoy en día «lo más progresista es conservar», en alusión al cuidado del entorno medioambiental, al tiempo que ha aseverado que, tanto la estabilidad como la sostenibilidad, «en todas sus acepciones» deben dejar de ser un debate de izquierdas o de derechas.
Además, se ha mostrado contrario a las nucleares, puesto que entiende que España debe apostar por la soberanía energética y dejar a un lado la dependencia de este sustento.
25.595 megawatios/hora al año
El compromiso medioambiental y social de Grupo Ortiz y Alten Energías Renovables ha quedado plasmado en este proyecto que, con una inversión cercana a los 8 millones de euros, evitará la emisión de unas 11.873 toneladas de CO2, el equivalente a retirar de circulación a 7.000 coches durante un año y producirá 25.595 megawatios por hora al año, el equivalente al consumo medio anual de 7.300 viviendas.
La planta está ubicada en los parajes denominados Nava, La Hoyuela y La Cruz del Contadero, al norte de la carretera nacional N-320, y en las proximidades de la urbanización Valde Los Llanos. El proyecto cuenta con una superficie total de 283.411 metros cuadrados (28,35 hectáreas).
Durante la construcción de la planta se ha dado empleo a más de 300 personas y han participado más de 40 empresas locales. Para la construcción de la planta se emplearon 6 meses en los que se realizó el acondicionamiento del terreno, la instalación de los seguidores solares y la instalación eléctrica necesaria el transporte de la energía producida.
Los componentes de la planta se han seleccionado utilizando la última tecnología disponible en el mercado, como ejemplo, el módulo fotovoltaico monocristalino de alta eficiencia convierte a la esta planta en una de las pioneras en la utilización de esta tecnología en España.
No se ha realizado ninguna eliminación ni tala de ninguna especie arbustiva y arborícola para la construcción de esta planta. Y para evitar posibles colisiones de aves, se procede al balizamiento de todo el perímetro vallado de la planta fotovoltaica.