En Castilla-La Mancha una persona se suicida cada dos días, una problemática que cada vez afecta más a personas con entre 15 y 44 años y que ha de ser tratada desde una perspectiva multidisciplinar que acabe con el estigma, pues visibilizar el suicidio puede contribuir a prevenirlo.
Así lo ha puesto de manifiesto este jueves el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, en declaraciones a los medios de comunicación antes de participar en el acto de celebración del Día Mundial de la Salud Mental en Toledo, donde ha dado cuenta de las estadísticas actuales.
Fernández Sanz ha recordado que el suicidio es la causa de la muerte de casi un millón de personas en el mundo, algo que tiene que «poner en alerta» al Gobierno autonómico que, en ese sentido, ha elaborado la Estrategia para la Prevención del Suicidio dentro del Plan de Salud Mental de Castilla-La Mancha 2018-2025.
[ze_gallery_info id=»340038″ ]En esa línea, ha sostenido que esta cuestión se debe abordar de forma transversal, de manera que abarque, aparte del plano sanitario, la educación y el empleo. Asimismo, este problema social se debe trabajar, a su parecer, con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, con el Ministerio de Justicia y con los medios de comunicación.
En este último ámbito, ha incidido en la necesidad de «acabar con los tabús» y de visibilizar y normalizar el suicidio, para lo que es preciso «hablar de ello con naturalidad», dado que, según ha precisado, nueve de cada 10 personas que se quitan la vida «lo han dicho más de una vez».
Por su parte, la presidenta de la Federación de Salud Mental de Castilla-La Mancha, María del Carmen Navarro, ha reiterado que el suicidio es un problema de salud pública del que hay que ocuparse, poniendo el acento en la población juvenil.
Al hilo de esta idea, ha explicado que en España se suicidan 10 personas al día y que la tasa de mortalidad es más elevada en personas mayores, aunque sin desdeñar a la población con entre 15 y 30, «con una tasa muy elevada que alcanza las 300 personas».
Tras reconocer la labor del Gobierno castellano-manchego para la prevención del suicidio, a diferencia de lo que ocurre en otras comunidades autónomas, Navarro ha recordado que en la región existen centros de rehabilitación y de salud mental para prevenir las causas. Y ha agregado que el silencio que se produce en ocasiones en torno a este asunto «impide que las personas que tienen ideación suicida no puedan pedir ayuda».
El Día de la Salud Mental se celebra este 10 de octubre bajo el lema «Conect@ con la vida», propuesto por la Confederación Salud Mental España y con el que pretende dar visibilidad a los problemas que sufren las personas con problemas de salud mental.
En esta ocasión, la conmemoración se centra en la prevención del suicidio, con el objetivo de derribar los mitos que existen en torno a esta realidad, y el acto de este día 10 es la culminación de una semana de celebraciones en la que se ha animado a la ciudadanía porque «no hay salud sin salud mental».
Durante el acto institucional, en el que han participado más de 300 personas, se han entregado los premios del certamen literario «Bálsamo de Fierabrás», una iniciativa conjunta de la Federación Salud Mental Castilla-La Mancha y la Consejería de Sanidad que persigue normalizar la enfermedad mentales y romper los estigmas que sobre ella persisten.
En este sentido, en la categoría de «Relato» ha resultado ganador Pablo José Conejo Pérez, siendo finalistas los relatos presentados por Delfina Molina Muñoz, Elena Naharro López, Marta Leal Escribano y Aránzazu Méndez Leblic.
Por su parte, en la categoría de «Poesías», la ganadora ha sido María de las Candelas Montenegro Loeches, mientras que los finalistas han sido Ana Belén Nevado Almaraz, María Teresa González Gallego, Pedro Manuel Montalvo Olivares y Vicente Dongo Flores.
Por último, en la categoría «Vivencias» en primera persona ha resultado ganado Ignacio Escribano Ucendo, mientras que los finalistas han sido Mari Cruces de la Flor Gallego, Luis Aitor Ramos Florín y María Montserrat Rosa García.