Nadie por debajo de María Dolores de Cospedal tiene tanto poder como él. Su puesto de presidente de las Cortes no define su nivel de mando como secretario general del PP en Castilla-La Mancha, ni su influencia en el Gobierno regional, donde ejerce prácticamente el papel de vicepresidente sin asiento en el Consejo de Gobierno.
De hecho, Vicente Tirado era en todas las quinielas el vicepresidente, puesto que finalmente no existe en el Ejecutivo autonómico -o era para él o no era- y nadie ha explicado suficientemente hasta ahora porqué acabó en presidente de las Cortes si en realidad es el que más manda del Gobierno.
El número dos de Cospedal ha convertido su despacho de las Cortes en el lugar más visitado de la región. Entre otras cosas, porque este manchego de carácter afable, sensible y dado al diálogo es más de abrir puertas que de cerrarlas. Y, porque, «debajo de Cospedal, Vicente es el que manda», suelen decir los interlocutores.
En la entrevista que mañana publicamos en encastillalamancha.es y de la que esta noticia es un adelanto, comenta cómo ha sido 2011, el mejor año de su vida política, pero también nos relata sin pudor cuál fue el peor momento, quiénes han sido sus enemigos y cómo y porqué los ha perdonado.
Aunque no llega al «ser superior» que hiciera famoso Emilio Butragueño referido a Florentino Pérez, poco le falta cuando habla de Cospedal, a la que no ahorra calificativos halagüeños, que él mismo resume en la expresión «la mejor». La debe todo y se lo paga cada día desde hace casi seis años manteniendo las provincias a raya, los egos de otros y otras bajo control y siendo el hombre al que más respeta para cerrar acuerdos ese PSOE que prefiere hablar a topar con el Gobierno.
En encastillalamancha.es se refiere a las conversaciones «casi diarias» de Cospedal con Mariano Rajoy y a que la presidenta ya ha hablado con todos los ministros. Reitera su polémica opinión sobre que el sucesor de José María Barreda no puede ser nadie que fuera cómplice de su mala gestion, por acción o por omisión, y echa en falta que José Bono, Emiliano García-Page o cualquier otro levantaran la voz e impusieran cordura en un presidente, Barreda, y un Gobierno que llegó a gastar el doble de lo que ingresaba.
Alaba el talante del responsable regional de UGT, Carlos Pedrosa; y censura el de su homólogo en Comisiones Obreras, José Luis Gil, al que considera más al servicio de Barreda que de su propio sindicato. Pese a todo, asegura que Cospedal se reunirá con todos los sindicatos, algo que la presidenta no ha hecho en sus seis meses en el cargo y, sin embargo, Rajoy realizó siendo aún presidente electo.
También habla Tirado de cómo son las relaciones del Gobierno con las dos grandes cajas rurales de la región y da su opinión sobre todos y cada uno de los que son y están en la primera línea de la actividad pública en Castilla-La Mancha y en sus provincicas.
Mañana, entrevista íntegra en encastillalamancha.es.