La Asociación de Periodistas de Ciudad Real (APCR) ha denunciado públicamente el veto que realizó Vox durante la noche electoral a una periodista de la cadena SER, Gema Molina, a quien «ubicaron» en el rellano de la sede, pero sin dejarla entrar en su interior, y le «facilitaron» una silla para que al menos se pudiera sentar. Desde esa silla y desde el mismo rellano hizo dos conexiones en directo.
«Lamentablemente los dirigentes provinciales han comenzado a aplicar las directrices e indicaciones que parten de la dirección nacional de la formación que lidera Santiago Abascal», afirman desde la APCR.
Vox puso como excusa que dentro había familias con niños y mucha algarabía
Por ello tratan de inadmisible el trato de la citada periodista, «quien padeció un injustificado trato por parte de los dirigentes de Vox. Molina se vio obligada a trabajar desde el rellano de la sede, donde le sacaron una silla con la excusa de que dentro había familias con niños y mucha algarabía».
No quedó ahí el asunto, puesto que «tras hacer dos conexiones en directo de ámbito regional con una hora de espacio entre cada una de ellas, Molina se disponía a grabar la valoración, que corrió a cargo del cabeza de lista a las elecciones generales por Ciudad Real, Ricardo Chamorro, cuando fue desalojada de la sede por el concejal de la capital, José Antonio Ruiz Valdepeñas, entre otras personas, con la excusa de que estaban cumpliendo una indicación que les llegaba desde Madrid».
Tras estos hechos, «la APCR rechaza el proceder de los dirigentes provinciales de Vox y defiende que indicaciones arbitrarias desde la dirección nacional de un partido no pueden interferir en ningún caso en el trabajo de un profesional de la información que realiza su tarea con una base deontológica impecable. Recuerda, además, que la cadena SER ha venido informando y ha difundido los mensajes electorales de Vox con normalidad durante toda la campaña electoral».