La red de espacios naturales de Castilla-La Mancha suma dos nuevos monumentos naturales, el Morrón de Villamayor, en Villamayor de Calatrava, y el Carbonífero de Puertollano, en el término municipal de dicha localidad, ambos en la provincia de Ciudad Real.
El Consejo de Gobierno ha aprobado en la reunión de este martes el inicio del procedimiento por el que se declararán protegidos estos dos nuevos espacios naturales de la región, ha informado en rueda de prensa el consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero.
De esta forma se va a asegurar la conservación y protección del conjunto de los valores naturales que se asocian a ambos espacios, según la Ley 9/1999, de 26 de mayo, de Conservación de la Naturaleza.
El decreto de declaración establecerá el marco normativo preciso para otorgar una atención preferente a la conservación de los valores geológicos, ecológicos, estéticos, educativos y sobre todo por la importancia científica, en el ámbito de la paleontológica.
Escudero ha señalado que, en cuanto al monumento natural de Morrón de Villamayor, supone un hito en la evolución del vulcanismo en el Campo de Calatrava ya que posee una composición mineralógica única en el conjunto de la Península Ibérica, mientras que en el Carbonífero de Puertollano, como ha explicado, «se han encontrado importantes yacimientos de fósiles que serán muy útiles en el estudio de la evolución humana y que ahora serán protegidos».
Desde el año 2015, la ampliación de la protección de los espacios naturales ha sido una de las premisas que se han tenido en cuenta en las políticas ambientales del Ejecutivo autonómico, ha dicho Escudero, quien ha recordado que en 2017 se protegieron el Estratotipo de Fuentelsaz (Guadalajara) y en junio de este año las Chorreras del Cabriel (Cuenca).
Así, la Red de Áreas Protegidas cuenta con 112 espacios y una superficie total de 581.000 hectáreas protegidas.