Un grupo de perros labradores colabora en la integración de menores tutelados en Guadalajara, como ha comprobado la directora general de Familia, Menores y Protección Social de Castilla-La Mancha, Silvia Valmaña, durante un encuentro con familias de acogida. Valmaña ha agradecido el compromiso de las familias de acogida por «abrir las puertas de sus hogares a otros niños, que tienen una determinada necesidad, para darles todo su cariño», según ha informado el Gobierno regional en un comunicado.
Los cuatro perros labradores, pertenecientes a la Fundación Bocalán, han realizado durante el fin de semana diferentes actividades en equipo e individuales, guiados por sus cuidadores, quienes han explicado la labor de adiestramiento de estos animales.
La posibilidad de compartir juegos con estos animales es un factor que facilita la integración social a menores que se han visto privados de un hogar normal.
Valmaña ha señalado que el objetivo del encuentro es potenciar el acogimiento familiar de menores tutelados por la Junta y ha subrayado la importancia que para estos niños tiene crecer en el seno de una familia estructurada.
Para quienes no pueden estar con su familia natural, «lo ideal es que estén con otra familia que les ayude, les cuide y atienda y, sobre todo, les dé cariño y puedan aprender los valores de la convivencia en un hogar normalizado», ha asegurado la directora general de Familia, Menores y Promoción Social.
Ha recordado que casi el 60 por 100 de los menores tutelados en la región conviven con familias, un porcentaje que la Junta quiere aumentar animando a más familias a iniciar una experiencia de acogida de un menor tutelado.
En el caso de Guadalajara, 60 menores están acogidos en 45 familias y otras 14 están en bolsa esperando acoger menores en situación de tutela.